Previsión meteorológica

Llega una nueva borrasca: así afectará Karlotta a Córdoba

Una persona camina bajo la lluvia en Córdoba.

Una persona camina bajo la lluvia en Córdoba. / Juan Ayala

El bloqueo anticiclónico de las últimas semanas, con récords de temperaturas máximas para la época, comienza a debilitarse por la llegada a la península de una nueva y profunda borrasca llamada Karlotta, que también va a cruzar la provincia de Córdoba en las próximas horas. Lluvia, tormentas y mal tiempo están garantizados para el resto de la semana, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

La inestabilidad meteorológica llegará a Córdoba a partir de este jueves 8 de febrero, después de la jornada de este miércoles 7 de febrero en la que el mercurio se moverá entre los 10 grados de mínima y los 16 de máxima. Un día, además, en el que el cielo estará parcialmente nublado.

Todo cambiará a partir de este jueves, para el que está previsto que se registren las tan ansiadas y necesitadas lluvias, que harán su aparición a partir de la tarde. No en vano, la probabilidad de que llueva es del 100% a partir de las 18:00. Las temperaturas, por su parte, se moverán entre los 5 de mínima y los 16 de máxima.

Para el viernes 9 de febrero, por su parte, la lluvia está más que garantizada en Córdoba a tenor del pronóstico publicado por la Aemet, que tampoco descarta que se registren tormentas por la tarde. Una lluvia, además, que se quedará todo el fin de semana, ya que para el sábado y para el domingo próximos la Agencia Estatal de Meteorología también la ha previsto, aunque también habrá huecos en los que el cielo se despejará y el sol lucirá entre las nubes.

En el caso de las temperaturas, lo que traerá la borrasca Karlotta será un notable descenso de las mismas. Y es que, por ejemplo, para este próximo fin de semana la mínima bajará hasta los 4 grados y la máxima se quedará en los 16.

La lluvia, además, se mantendrá en Córdoba en las primeras jornadas de la semana que viene, según el pronóstico de la Aemet, en el que, además, avanza un notable cambio de las temperaturas, ya que la máxima subirá hasta los 23 grados, sin duda, unos registros más parecidos a la primavera que al invierno.

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