La alcaldesa de Córdoba, la socialista Isabel Ambrosio, ofreció ayer la ciudad al Gobierno de España para acoger a refugiados del barco Aquarius, en dirección al Puerto de Valencia. Según informó el Ayuntamiento, ante la situación de "emergencia humanitaria" que tiene lugar en el Mediterráneo y tras las decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de ofrecer Valencia como puerto de atraque del buque a bordo del cual navegan más de 620 refugiados, la alcaldesa se ha dirigido al Ejecutivo, a través de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), para "ofrecer la ciudad de Córdoba como lugar de acogida, para el número de refugiados que en su momento se determine".

Al respecto, el Consistorio recordó que "Córdoba se sumó hace dos años a la Red de Municipios de Acogida a Refugiados" y que "ya en aquel momento, con motivo de la crisis en Siria, ya se ofreció al Gobierno presidido por Mariano Rajoy para acoger el número de refugiados que se determinara". Con esta decisión, el Ayuntamiento pretende "poner en marcha los mecanismos de actuación, para una intervención social organizada desde las instituciones más cercanas a los ciudadanos, que son, precisamente, quienes hasta el momento han mostrado una mayor sensibilidad y solidaridad, para la acogida de los que huyendo de la guerra y el terror buscan asilo en Europa". Así, la alcaldesa manifestó que "una ciudad como Córdoba no puede ser ajena al drama que están viviendo millones de personas". "Una situación que no hace tiempo sufrieron decenas de miles de españoles, que fueron generosamente acogidos en países europeos y americanos, cuando tuvieron que huir del horror de una guerra y la consiguiente represión, o de unas condiciones económicas que les habían condenado a la miseria", argumentó. Los objetivos de la Red de Municipios de Acogida de Refugiados pasan por elaborar un Protocolo de Acogida de Refugiados en coordinación con las instituciones y las entidades colaboradoras y propiciar el intercambio de información y experiencias con el fin de fortalecer los procesos de acogida.