El grupo municipal socialista ha denunciado la "dejadez y abandono" por parte del equipo de gobierno municipal "de la población más indefensa de nuestra ciudad, los menores en situación de vulnerabilidad". La concejal Alicia Moya se ha referido concretamente al Programa PAPI (Programa de Actuación y Prevención en la Infancia), un recurso del Ayuntamiento dirigido a menores en riesgo de exclusión o desprotección. Se utiliza de manera individual o grupal en todos los distritos de la ciudad y se contrata mediante licitación.

El PSOE ha recordado que este servicio lleva prorrogado dos años "y esos dos años se han cumplido justo en el día de hoy". "Si terminara este programa finalizarían todas las actuaciones e intervenciones que se están realizando con menores en diferentes zonas de Córdoba", ha indicado Moya.

Moya ha detallado que desde la Delegación de Servicios Sociales se ha argumentado el interés público como causa fundamental para solicitar una prórroga más para este programa "fuera de todo plazo". "Hace sólo un mes, el 9 de noviembre, se acordaron de que el programa finalizaba y que había que prorrogarlo. Ya se ha iniciado el expediente para la prórroga y no hay plazo suficiente para tramitarlo", ha incidido.

Los socialistas afirman que "no debe entenderlo así un gobierno que espera hasta el último minuto para levantar el reparo lógico presentado por Intervención. Se firmó este mismo sábado", ha apuntado.

“Dos años de prórroga y una licitación fallida en junio del año pasado tienen a trabajadores de la empresa adjudicataria y a las familias con menores, beneficiarias de este programa, esperando a que este ayuntamiento gestione de una vez por todas de manera eficiente”, ha asegurado la edil socialista.

Para el PSOE, las razones para este reparo son "la absoluta falta de previsión y la nula gestión de los responsables políticos del gobierno municipal". Moya ha destacado que en junio de 2020 se publicó un anuncio de licitación para el programa de prevención infantil que hubo que anular porque se detectaron cuestiones que podían ser causa de desistimiento en el futuro y se prefirió subsanarlas cuanto antes.

"El resultado es que ahora nos encontramos con un programa de vital importancia para los menores más vulnerables de nuestra ciudad que depende de que el equipo de gobierno, con el alcalde a la cabeza, se acuerde de ellos. Lo peor de todo es que a día de hoy hay alrededor de 40 trabajadores y cientos de familias sin saber si seguirán o no estas actuaciones esenciales", ha sentenciado.

“Volvemos a encontrarnos en la situación en la que vimos el contrato de servicio a domicilio, con continuas prórrogas hasta que se consiguió adjudicar. La eficacia de este gobierno municipal está más que en entredicho”, ha afirmado Moya.

La plantilla de Servicios Sociales sigue menguando

Para el grupo municipal socialista, el abandono y olvido de este gobierno municipal se ve plasmado también en el tratamiento que se hace del personal de Servicios Sociales. "El programa PAPI tiene un carácter de atención inmediata, preventiva y complementaria a la intervención realizada por los profesionales de los Servicios Sociales Municipales y en este caso hablamos de educadores", ha destacado.

Moya ha incidido en que la plantilla de educadores sigue menguando a base de jubilaciones y que el Ayuntamiento no da ninguna solución a esa falta de personal. A pesar de tener una lista de educadores aprobados sin plaza en la última convocatoria, “no parece que vayamos a ver cómo se contrata a ninguno”.

Moya ha destacado que estos profesionales son los que se hacen cargo de trámites imprescindibles con la Fiscalía y protección de menores, "y cada día están más desbordados de trabajo y cada vez más solos y olvidados".

Sólo en los centros de Las Palmeras, Sur, Levante y Ciudad Jardín hay al menos dos educadores. En Las Moreras, la Fuensanta o la Ribera hay sólo uno. Y alguno de ellos está pendiente de jubilarse. Esta plantilla es, a todas luces, insuficiente para prestar un servicio de calidad en un ámbito de derecho básico del menor", ha indicado.