Una agente afirma que la forense que descartó los huesos no estuvo presionada

Juicio a bretón

La policía testifica que la forense "decía que los restos eran de roedor o de gato" y en ningún momento afirmó que alguno pudiera ser de humano

Una agente afirma que la forense que descartó los huesos no estuvo presionada
Anabel Calero

Córdoba, 24 de junio 2013 - 11:49

Los restos óseos encontrados la noche del 10 de octubre de 2011 en la finca de Las Quemadillas -y que son una de las principales pruebas para imputar a José Bretón el asesinato de sus dos hijos Ruth y José-, salieron ayer a escena en el juicio que se celebra desde la semana pasada para esclarecer los hechos y determinar si Bretón es culpable. Fue a través del relato de la agente de la Brigada de la Policía Científica de Córdoba que acompañó a la perito Josefina Lamas que examinó por primera vez los huesos y que emitió un informe en el que aseguraba que se trataban de restos de animales en lugar de humanos. La agente -que durante el examen se encargó de auxiliar a la perito por si necesitaba ayuda- aseguró ayer que la forense "no tuvo ninguna presión para ir más rápida", sino la "normal" que conlleva su trabajo. La testigo relató igualmente que el examen de los restos se desarrolló durante toda la jornada del 11 de octubre, desde las 10:00 hasta las 19:00 aproximadamente y que la perito realizaba inspecciones oculares de los huesos ayudada de material específico para ello. Durante el tiempo que se prolongó el examen, la policía aseguró que la forense comentaba "que los huesos no eran de humanos, sino que parece ser de roedor o de gato" y que "en ninguna ocasión" afirmó que pudieran ser restos de niños. Aunque habrá que esperar a escuchar en la misma sala a la propia perito, la declaración de esta testigo no cuadra con la que aquella dio en su momento, cuando apareció un informe posterior del antropólogo Francisco Etxeberria y dictaminó que sí trataba de huesos de niños con las edades de Ruth y José. Contra esta evidencia, la policía que inspeccionó los restos se defendió asegurando que había trabajado bajo presión y no tuvo tiempo para realizar un trabajo exhaustivo. La testigo, a preguntas de la acusación particular, aseguró que la forense no demandó llevar los restos a otro laboratorio en el que pudiera contar con más material ni que pidió más días para continuar con la inspección.

La agente también se refirió a la cadena de custodia y señaló que esa misma noche del 11 de octubre la Brigada de la Policía Científica de Sevilla se hizo cargo de la caja precintada que contenía los huesos aunque no precisó si en ese mismo momento se trasladaron hasta la capital hispalense o permanecieron en la comisaría de Córdoba.

Hay que tener en cuenta que uno de los principales puntos de la defensa de Bretón se basa en que no se cumplió con la cadena de custodia e invalidar así la prueba de los huesos. No obstante, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha rechazado el argumento del abogado del acusado, José María Sánchez de Puerta, descartando que se produjera alguna irregularidad.

La declaración de la agente que ayudó a la forense ha sido recibida de manera desigual para la acusación y para la defensa. En concreto, Sánchez de Puerta -que preguntó a la policía si en la comisaría había caja fuerte-, aseguró a la salida de la sesión que el testimonio de la policía auxiliar deja claro que la forense "no trabajó bajo presión" y también que la ausencia de caja fuerte refuerza su teoría sobre la cadena de custodia. Para la abogada de Ruth Ortiz, sin embargo, la testigo ha constado que las cajas donde se almacenaron los restos óseos "estaban perfectamente precintadas" y lo demás "es pura denuncia", por lo que la cadena de custodia "no tiene ningún tipo de problema". Además añadió que la perito "no tenía un conocimiento especial" y por eso "tiró para adelante", de ahí que se pueda "equivocar".

16 Comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último