El presidente andaluz, Manuel Chaves, volvió ayer a poner sobre la mesa el debate sobre la energía nuclear. En una entrevista concedida al diario Expansión, Chaves confesó no ser partidario de esta fuente, pero tampoco descartó "cambiar de opinión en un futuro", si hay avances tecnológicos que "resuelvan la seguridad o los residuos". Pese a su no de entrada, dijo no tener reservas para un "debate abierto" en el que se escuche "a todo el mundo".
La pasada semana, el consejero de Innovación, Francisco Vallejo, defendió y justificó en el Parlamento el rechazo a la nuclear no sólo en aspectos como la seguridad y la contaminación, sino en su escasa viabilidad por su alto coste, y reiteró que la apuesta Gobierno andaluz son las renovables.
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