Una vez finalizada la recolección del arroz en las marismas sevillanas se comprueban entre los agricultores los mismos temores que en la pasada campaña. Las importaciones masivas de arroz de países asiáticos como Camboya y Birmania, usando a veces una ruta a través de Vietnam, no sólo hacen peligrar los precios por el producto sino incluso la propia supervivencia del cultivo en Europa, donde Andalucía es una de las zonas de referencia.

La situación ha sido debatida recientemente por el grupo de trabajo del Arroz en el Copa Cogeca, órgano de representación de organizaciones agrarias y cooperativas, donde el nuevo presidente, el italiano Ferraris, advirtió que el sector del arroz de la UE está gravemente amenazado y de la presión ejercida sobre los precios.

En su intervención tras la votación del grupo de trabajo, Ferraris afirmaba que "el sector del arroz de la UE tiene un papel crucial a la hora de garantizar el empleo en muchas zonas rurales, y también es importante para el medio ambiente. Pero desafortunadamente el sector está sufriendo debido a la creciente competencia proveniente de las importaciones de países extracomunitarios, que inundan el mercado de la UE y que no tienen que cumplir con los mismos requisitos que se exigen a los países de la UE", aseguraba.

Las importaciones de arroz a la UE de los países acogidos al acuerdo Todo salvo armas (principalmente Camboya y Myanmar) se han incrementado, de 10.000 toneladas durante la campaña de comercialización 2008/2009 (equivalentes de arroz blanqueado) a 402.000 toneladas en 2013/2014.

Las importaciones a la UE de Camboya se han incrementado y han pasado de 6.012 toneladas en 2009 (equivalente de arroz blanqueado) a 255.000 toneladas durante la campaña de comercialización 2013/2014. Las importaciones de arroz de Camboya están compuestas de arroz blanqueado, de arroz semiblanqueado y de arroz empaquetado listo para la venta minorista.

En su mayoría se trata de arroz de la variedad índica, que está en competencia directa con la producción europea de arroz de la misma variedad, que representa el 35% del total de la producción de arroz de la UE y que es mayoritaria en la zona arrocera sevillana.

El presidente del grupo del arroz comentaba que "el aumento de las importaciones está generando una situación preocupante para los agricultores y las cooperativas agrícolas y, en los casos más graves, se corre el riesgo de que se abandone por completo la producción de arroz. Esto tendría un impacto negativo sobre la biodiversidad y la calidad del agua y el suelo (riesgo de salinización), en particular en las zonas donde no se puede cultivar nada más.

Por consiguiente el Copa Cogeca insta a la Comisión a que aplique las cláusulas de salvaguardia que están incluidas en la iniciativa Todo salvo armas. La aplicación de la nueva política de promoción de la UE también será importante para el sector para impulsar el consumo de arroz de la UE en el mercado doméstico y para que los consumidores sean plenamente conscientes de que este cultivo cumple con las normas de producción más exigentes de la UE y con plena trazabilidad.

Hace unos meses también se reclamaba desde España e Italia que se activara la cláusula de salvaguardia para el arroz y hace ahora un año el gerente de la Federación de Arroceros de Sevilla y entonces presidente del grupo del Arroz del Copa Cogeca ya había denunciado que se podían estar produciendo prácticas de triangulación para eludir así los aranceles, por lo que se ha exigido su comprobación y la vigilancia por parte de la CE para que se cumplan estrictamente los acuerdos, una denuncia también respaldada por Asaja.

Las variedades predominantes en la marisma sevillana son las de grano largo (aproximadamente un 80%) si bien también se cultiva arroz de grano redondo o japónica (20% ).

La superficie sembrada de arroz en Sevilla produce anualmente unas 330.000 toneladas de arroz cáscara, que suponen una tercera parte de las necesidades nacionales de arroz, que generan anualmente 150 millones de euros y crean unos 400.000 jornales entre fijos y eventuales anuales.

Otros arroceros

También en España, la Unió de Llauradors, organización agraria de ámbito valenciano, donde se encuentra otra importante zona arrocera, ha solicitado que las autoridades europeas establezcan esta cláusula de salvaguardia para el arroz procedente de Birmania y Camboya debido al "aumento considerable" de sus exportaciones, que pueden causar un "desequilibrio" en los mercados de las zonas productoras europeas.

Para La Unión, Birmania y Camboya se benefician de un "nuevo estatus comercial preferencial" con la Unión Europea, al quedar incluidos dentro del marco del acuerdo por el cual todas las importaciones a la UE desde los países menos avanzados del mundo estarán libres de pago de tarifas aduaneras, con la excepción de las armas.

De este modo, Camboya ha "desarrollado mucho" sus capacidades de exportar arroz, y ha pasado de unas 6.000 toneladas exportadas en 2009 a la UE a las 255.000 de la campaña 2013-2014, y a estas exportaciones se añaden las de Birmania, que suponen el resto, hasta llegar a 400.000 toneladas.

Teniendo en cuenta esta situación, La Unió y el resto de organizaciones de la Unión de Uniones, yasolicitaron al Ministerio de Agricultura en septiembre que informase "de forma urgente" a la Comisión Europea sobre la amenaza de estas importaciones, "para que ésta desencadene el mecanismo de vigilancia que permita valorar la perturbación del mercado interior y plantear medidas de salvaguardia".

"También se le pidió en la campaña pasada al entonces ministro Arias Cañete que solicitase la cláusula de salvaguardia y, a través de los diferentes partidos políticos, se ha instado a presentar proposiciones de este tipo tanto en el Congreso de los Diputados como en el Parlamento Europeo", han insistido.

"En la Comunidad Valenciana, el sector del arroz desempeña, además, un papel fundamental para el medio ambiente porque la zona de cultivo está dentro de un Parque Natura, el de la Albufera", han añadido, y han considerado que "no se puede consentir que se hunda a un sector tan importante".

Para Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE en Extremadura, otra importante zona arrocera, existe una gran preocupación en el sector por las importaciones que están ocasionando un hundimiento en los precios. Huertas insiste en que es necesario que el Ministerio de Agricultura "adopte las medidas necesarias para la defensa del cultivo y de los arroceros y se aplique la cláusula de salvaguarda durante el periodo de comercialización, destinada a restablecer los aranceles cuando las importaciones puedan causar un perjuicio grave a los productores comunitarios".

Así, UPA-UCE denuncia que los actuales precios que perciben los cultivadores de arroz por su producto están por debajo de los costes de producción, lo que está haciendo que muchos agricultores abandonen este cultivo fundamental para el regadío extremeño. El dirigente agrario recuerda que España es un exportador neto de arroz y uno de los principales productores de la UE, con 850.000 toneladas al año; y que en Europa se produce menos arroz del que se consume.