Palomo Spain convierte el Ballet de Nueva York en un arco iris de medio millón de cristales Swarovski
Moda
Diez diseños diferentes, firmados por el cordobés, llenaron de color la 10ª edición de la Gala de Moda de Otoño del Ballet de Nueva York
Se ha desvelado uno de los secretos mejor guardados de la 10ª edición de la Gala de Moda de Otoño del Ballet de Nueva York.
Desde 2012 este evento ha reunido a coreógrafos y algunos de los nombres más destacados del mundo de la moda.
Este año Palomo Spain, Raf Simons y Giles Deacon eran los encargados de diseñar el nuevo vestuario de la compañía.
Y una vez más, el modisto de Posadas no ha defraudado. Sobre el escenario aparecían una decena de modelos que transitaban de uno al otro extremo del arco iris en poderosas tonalidades monocolor.
"No todo lo que brilló fue oro en el escenario del Ballet de Nueva York el pasado jueves por la noche durante el estreno mundial de Gianna Reisen, sino el medio millón de cristales de Swarovski incrustados en nuestros diseños que se reflejaban sobre el comienzo de la primera partitura de ballet de Solange Knowles", revelaba la propia firma de moda española desde su perfil de Instagram.
El programa especial incluía un estreno mundial de la coreógrafa y bailarina Gianna Reisen con vestuario del maleno Palomo Spain. El otro estreno llegó de la mano de Kyle Abraham, con creaciones del diseñador Giles Deacon.
La tercera gran cita fue Solo, creado por el coreógrafo residente y asesor artístico del Ballet de Nueva York Justin Peck , con un vestuario diseñado por Raf Simons. El programa lo completaba un extracto de la deslumbrante Sinfonía en do del cofundador de la compañía, George Balanchine .
Esta año la Gala homenajea a la vicepresidenta de la compañía que no es otra que la famosa Sarah Jessica Parker. La actriz es un icono de moda mundial desde que se metiera en la piel -y en los carísimos Manolos- de la columnista Carrie Bradshaw, protagonista de la inolvidable serie Sexo en Nueva York.
La glamurosa velada, considerada el punto de arranque de la temporada cultural neoyorkina, comenzó con cóctel organizado por las bodegas Ruinart Champagne, pertenecientes al lujoso holding internacional LVMH.
A últimas horas de la tarde dio comienzo el programa de los tres ballets, que se presentaron como aperitivo de la temporada de otoño. Y el fin de fiesta llegó en forma de baile de gala donde estuvo lo más granado de la sociedad neoyorkina e internacional.
Temas relacionados
No hay comentarios