En pleno corazón de la ciudad, el Parque o Jardines de Colón no sólo son uno de los principales pulmones verdes de la capital sino que destacan por la belleza de su diseño y por la mezcla de culturas y estilos. Es, además, uno de los principales circuitos de running y alberga uno de los parques de juegos infantil más agradables de la urbe. Por eso no es alocada su comparación, en versión reducida, con el bellísimo Parque del Retiro madrileño. 

Lo que muchos de sus transeúntes habituales desconocen es que: 

1. En sus orígenes este enclave constituía una de las salidas naturales de la ciudad hacia el norte.
2. Los Jardines de Colón también son conocidos como Jardines de la Merced pues están justo en frente al antiguo convento del mismo nombre. Y es que el actual Palacio de la Merced -sede de la Diputación de Córdoba- fue antiguo convento de la Merced Calzada, edificio declarado Bien de interés cultural en la categoría de Monumento desde el año 2008.
3. Los jardines están presididos por una espectacular fuente de estilo neorromántico diseñada en el siglo XIX por el escultor Rafael del Rosal.
4. La fuente se articula en torno a un gran pilón circular sobrecargado de figuras de veneras y peces mitológicos. El centro lo conforman dos valvas superpuestas que recogen el agua de un surtidor central en la parte superior.
5. La plaza tiene forma circular inspirada en la plaza de toros que había en el lugar hasta 1831. 
6. Los jardines y la fuente se construyeron con 15 años de diferencia: los primeros en 1905 y la fuente en 1920.
7. Las esquinas de los Jardines de Colón están custodiados por dos colegios: Colón y Ferroviario, cada uno en una de las esquinas. 
8. En el interior de los Jardines está la Mezquita de Al-Morabito, donde se practica el culto al Islam. Fue construida allá por 1940 como regalo del propio Franco a los soldados musulmanes que lo asistieron, conocidos como la Guardia mora, para que tuvieran un sitio de culto. 
9. Una de las entradas al Parque está precedida por la Fuente dedicada a la mujer cordobesa, de reciente construcción y homenaje directo a la relación de la ciudad con el agua desde época romana.
10. Llaman poderosamente la atención sus abundantes y variados árboles, entre los que podemos ver pinos, palmeras datileras, naranjos, melisas y plátanos de sombra.