Ruth Lorenzo y la evocación de su noche eurovisiva de 2014, Dancing in the rain, será uno de los ingredientes de esta noche de final, nervios y votos (y polémica, algo habrá seguro) con el Benidorm Fest 2024. La cantante murciana es la conductora junto a Marc Calderó y Ana Prada de una gala que arranca a las diez de la noche en La 1. Una gala en directo con ocho canciones en un acontecimiento en el que el ganador se marcha en mayo a Malmö a defender a España en el Festival de Eurovisión. Hay ritmos distintos y espectáculos diferentes, nivel medio alto aunque falta una propuesta poderosa que garantice estar en un Top 5 de cara a la cita continental. Sea quien sea el ganador, hay que pulir la puesta en escena de la ganadora, donde ha prevalecido lo barroco y tal vez lo previsible.

María Peláe es la que tiene más abrillantada su historia de Remitente. Las bulerías comienzan a las 22.15 a sonar, abriendo el orden de intervención. Fue Blanca Paloma, la que llevó a Liverpool otras bulerías, las de Eaea, la que con su mano inocente decidió que la malagueña abra de nuevo el escenario. Remitente es una reclamación a la memoria de las mujeres de la posguerra con cuatro bailarines de los que María, guitarra en alto, se libera.

En segundo lugar (22.20) llega la canción favorita del jurado, un pedazo de bolero, Dos extraños (cuarteto de cuerda) con el canario St. Pedro. Una melodía sentimental y una voz cálida entre bailarinas que evocan el amor roto y que probablemente reaparezcan en la anfitriona eurovisiva.

En el tercer lugar el pop potente de Angy Fernández con su autobiográfico Sé quien soy (22.25). Un escenario en blanco y negro, en una interpretación atronadora por parte de la actriz y cantante que ha regresado así al primer plano.

El cuarto lugar de aparición es para el ritmo Caliente caribeño de Jorge González.(22.30) Puede sonar vintage, pero la coreografía junto a los cuatro bailarines está a la altura del nombre de la canción, sin sutilidades en cuanto a la sexualidad. Fiesta y disco en un tema llamado como mínimo a sonar en verano y con posibilidades de tomar el avión a Suecia.

En quinto lugar, los ganadores de la primera semifinal, los alicantinos Nebulossa y un auténtico himno como Zorra. Empoderamiento y orgullo, Mery Bas, la veterana cantante, se acompaña en ambiente burlesque de dos bailarines en corsé. Como mínimo una puesta en escena impertinente al nivel del nombre.

La catalana Sofía Coll aparece en sexto lugar con Here to stay, otro pop poderoso, casi extenuante, que conjuga castellano, catalán e inglés en una coreografía vertiginosa y que por momentos parece caótica. 

Los manchegos Miss Caffeina aparecen en séptimo lugar con Bla bla bla, un canto al desamor y el escepticismo. Unos bailarines que simulan sombra para este consolidado grupo que no está llamado a entrar en la liza de la victoria.

Y cierra Almácor, pop urbano actual, la opción más juvenil, a lo Quevedo (el reguetonero), con efectos especiales y una textura electrónica para un solista que se basta para captar al personal. Brillos Platino puede dar la sorpresa por el televoto aunque el alicantino tendría que mejorar en entonación respecto al pase de semifinales.

El jurado, con Ángela Carrasco, Carlos Baute, Guille Milkyway y Beatriz Luego, tendrá el 50% del peso de la decisión de este sábado, que llegará en torno a la medianoche. El público puede intervenir en el televoto, previo pago, y hay un desconcertante jurado demoscópico que puede terminar siendo decisivo. 

La solución, recién iniciado el domingo.