En Pozoblanco, las previsiones de lluvias intermitentes durante la tarde y noche del Martes Santo han llevado a las cofradías a tomar la difícil decisión de no realizar las estaciones de penitencia previstas para esta noche.

La Hermandad Servita y Cofradía de Nazarenas de María Santísima de los Dolores ha sido la primera en decidir suspender la procesión en la noche del Martes Santo, con una salida prevista para las 20:00 desde la puerta del Santísimo de la Parroquia de Santa Catalina, momento en el que estaba lloviznando.

Tras la reunión con el cabildo de aguas se ha tomado la decisión, que ha comunicado a todas las nazarenas presentes la hermana mayor, María de las Mercedes Martín. Tras este comunicado se ha iniciado una oración, Vía Matri, en la intimidad para posteriormente abrir la puerta a los fieles que quisieran ver a la María Santísima de los Dolores.

A tan solo unos metros de distancia, en la Capilla de Jesús Nazareno, la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno ha esperado hasta las 20:30, según estaba programada la salida, para anunciar en la voz de su presidente, Rafael Sánchez Luna, la suspensión de la estación de penitencia en la calle "siguiendo la responsabilidad que siempre ha caracterizado a la hermandad durante muchos años".