La Comisión Provincial de Patrimonio de la Delegación de Turismo, Cultura y Deporte, que preside el delegado territorial, Eduardo Lucena, ha informado favorablemente acerca del proyecto de rehabilitación presentado para la fachada principal y pilastras de la iglesia de la Santísima Trinidad de La Rambla. El proyecto se plantea para resolver problemas puntuales de conservación del edificio, principalmente los daños en la portada, que motivaron una intervención de emergencia en 2021, mediante la colocación de una red de protección.

La portada está realizada en piedra jaspe y pintada en color almagra. Está formada por un vano adintelado flanqueado por molduras geométricas y un frontón partido superior que da paso a un segundo cuerpo con hornacina flanqueada por columnas y coronado con frontón triangular, con pináculos de bolas y cruz de la orden trinitaria. En la hornacina está presente la imagen del Ángel Trinitario, que libera a dos cautivos.

La portada se encuentra muy degradada, con daños por humedad, separación de elementos, disgregación, fracturación y exfoliación de la piedra, rupturas, erosión, formación de biocostra, disgregación y pérdida del mortero de juntas, deformaciones, biodeterioro, reparaciones con morteros de cemento, pintura en superficie, manchas y suciedad.

La restauración seguirá las fases de limpieza, consolidación y protección mediante la limpieza general y específica, eliminación de pintura en seco, cosido de grietas y elementos desplazados, así como aplicación de fungicida y conservante. Sobre la imagen del Ángel Trinitario, se contemplan las mismas actuaciones además de eliminación de suciedad. 

Pese al informe favorable, la Comisión de Patrimonio plantea que el cosido de grietas y fisuras debe hacerse con varillas de fibra de vidrio o de carbono y no con acero, para evitar problemas de oxidación. Igualmente estipula que, aprovechando las obras, se deberían analizar las distintas capas de color de los elementos decorativos de la fachada, zócalo y molduras, para dar un acabado coherente al conjunto. 

La iglesia y el antiguo convento de la Santísima Trinidad de la Rambla fueron declarados Bien de Interés Cultural (BIC), con la categoría de Monumento, y están inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz (Cgpha). La declaración incluye un conjunto de bienes muebles y un entorno de protección. 

El antiguo Convento de la Santísima Trinidad, fundación del primer tercio del siglo XVI, se ubica al este del núcleo urbano de La Rambla. Se ordenaba alrededor de un gran claustro de planta cuadrada con arquerías de nueve vanos, arcos de medio punto de ladrillo sobre columnas de piedra, con basamento y capiteles de orden toscano.

La iglesia tuvo una única nave durante los siglos XVI y XVII, de tres tramos separados por pilastras y ábside cuadrangular con bóveda de cuarto de esfera sobre pechinas. En el siglo XVIII se amplió el templo con otra nave lateral para el sagrario, abriendo arcos ojivales enmarcados con alfiz y cubriéndose la nave por bóveda de cañón con lunetos y ábside con bóveda elíptica. En la nave del sagrario se ubican tres camarines neoclásicos.

La fachada, muy modificada, presenta una portada barroca con frontón partido y hornacina bajo frontón triangular de remate, dos ventanales altos y amplios iluminan el interior. Termina con hastial donde se sitúa lateralmente el campanario.

El declive del edificio comienza con los daños sufridos durante la ocupación francesa y la posterior desamortización. Tras la vuelta de los trinitarios a finales del XIX, el antiguo convento se mantuvo en uso hasta el año 1961. Todavía estaba en pie, aunque en muy mal estado, en 1990, cuando pasó a ser de propiedad municipal. Tras diversos derrumbes y demoliciones, sólo se conservaron restos en planta baja de dos de las crujías del claustro. La iglesia llegó a estar también en estado semiruinoso, habiéndose recuperado en los últimos años.