Montilla aprueba una ordenanza que multa con hasta 3.000 euros a los puteros

Montilla/El Ayuntamiento de Montilla acaba de dar el visto bueno a la primera ordenanza de la provincia de Córdoba que castiga la trata de mujeres, con multas de hasta 3.000 euros para los puteros y los proxenetas. La Ordenanza contra la Prostitución y la Trata con Fines de Explotación Sexual, como técnicamente se denomina, ha sido aprobada con la unanimidad del Pleno municipal (PSOE, IU y PP); en los próximos días se abrirá el plazo de exposición pública y, si no se presentan alegaciones, entrará en vigor.

El texto, inspirado en normas similares que ya se aplican en León y Sevilla, es el resultado de un trabajo que arrancó en septiembre de 2023, cuando la corporación aprobó una moción presentada por IU para luchar contra el proxenetismo. "La normativa tiene un espíritu 100% abolicionista", ha subrayado la portavoz de la coalición de izquierdas, Rosa Rodríguez, quien ha explicado que se persigue tanto el consumo de prostitución en zonas públicas como la publicidad de locales en los que se prostituye y se trata con mujeres.

"La prostitución y la trata son dos caras de la misma moneda", ha insistido la edil, quien ha destacado que mientras que en Montilla haya una sola mujer que se vea obligada a ejercer la prostitución esta normativa es "absolutamente necesaria". En la localidad "hay lugares donde se ejerce la prostitución", igual que "hay mujeres de otros pueblos que vienen reclamadas por los puteros de Montilla", ha incidido Rodríguez, quien ha destacado que la lucha contra el proxenetismo "tiene mucho trabajo detrás".

La concejala de Igualdad, Lidia Bujalance (PSOE), ha destacado la labor que se realiza desde este área en cuanto a la elaboración de un borrador que trate en materia de prostitución proteger los derechos de aquellas personas que puedan resultar víctimas de prostitución, garantizar la convivencia en espacios públicos y prohibir la colocación de publicidad que difunda el consumo de prostitución. Desde el Partido Popular, Federico Cabello de Alba, apoyaba esta ordenanza, ya que para los populares “cumple y va a ser útil para los fines que son perseguidos".

Sanciones de hasta 3.000 euros

La finalidad de la ordenanza es "promover, dentro del ámbito de las competencias municipales del Ayuntamiento de Montilla, la erradicación de la prostitución y otras formas de explotación sexual en el municipio, con el objetivo de proteger los derechos de las víctimas del ejercicio de la prostitución". Así, la ordenanza articula una serie de medidas de carácter jurídico, así como recursos psicosociales, para defender y proteger a las personas víctimas de prostitución y de explotación sexual, y para garantizar la convivencia en el espacio público.

La norma, en concreto, "prohíbe las prácticas sexuales y la solicitud, negociación y aceptación directa o indirecta de servicios sexuales retribuidos en la vía pública". Asimismo, se prohíbe "la colocación, reparto, divulgación o difusión de publicidad que promueva, favorezca o fomente el consumo de prostitución y la explotación sexual de las personas, el mercado de la prostitución y el turismo sexual".

La infracción de la ordenanza se castiga con multas de 1.500 a 3.000 euros (conductas muy graves), graves (de 750 a 1.500 euros) y leves (hasta 750 euros). Se tipifica en esta última categoría "colocar, repartir, divulgar o difundir publicidad que promueva, favorezca o fomente el consumo y mercado de la prostitución, así como el turismo sexual, cuando se utilice el espacio público o los elementos que lo integran".

En cuanto a las infracciones graves, se incluyen "solicitar o aceptar directa o indirectamente servicios sexuales retribuidos"; realizar cualquier actividad de carácter sexual en el espacio público a cambio de retribución, en dinero o en especie o cualquier otra contraprestación; "colaborar con los demandantes de servicios sexuales con acciones como facilitar, vigilar y alertar sobre la presencia de agentes", y "favorecer o promover el consumo de prostitución u otras formas de explotación sexual, el mercado de la prostitución y el turismo sexual".

Por último, se consideran conductas "muy graves" cuando las anteriores se desarrollen en espacios situados a menos de 200 metros de distancia de centros docentes o educativos o de celebración de cualquier acto público de naturaleza cultural, lúdica y deportiva, con afluencia de público, o en aquellos puntos que impliquen una mayor vulnerabilidad para las personas en situación de prostitución.