Los trabajos de mejora del Santuario de Aras darán comienzo una vez que se celebre la tradicional bajada de la Virgen de Araceli hasta Lucena, esto es, a partir del 21 de abril, fecha en la que tendrá lugar la celebración. A partir de entonces se iniciarán las obras que incluyen la citada mejora del acceso a la ermita, pero también de la carretera que la une con la localidad.

El hermano mayor de la Real Archicofradía de María Santísima de Araceli, Rafael Ramírez, ha informado del inicio de las actuaciones, que están valoradas en unos 240.000 euros.

Ramírez ha explicado que este proyecto se centra en la mejora de la accesibilidad de la explanada exterior del santuario y de la carretera.

Así, en la explanada de la ermita se habilitarán en la unos itinerarios libres de barreras que conecten esta zona con la escalera lateral, desde la que se facilitaría el acceso a la nave central del templo. Esta parte de la obra también contempla, según ha avanzado, la ubicación de un ascensor para facilitar el acceso al camerín por parte de aquellas personas que tienen problemas de movilidad.

La construcción de los columbarios es otra de las actuaciones previstas. El hermano mayor ha recordado que para su construcción ya disponen de financiación suficiente gracias a la venta –ha cifrado en coste en unos 40.000 euros–, hasta el momento, de 17 unidades. Se trata de un proyecto que dotará a la ermita con unos 500 columbarios.

Los columbarios tienen un precio de 3.000 euros más IVA, de los que hay que abonar 300 para hacer efectiva la reserva, obteniendo así una concesión por 50 años. Para el desarrollo del proyecto, la hermandad cuenta ya con una subvención por parte de la Diputación cifrada en 45.000 euros, aunque el presupuesto del mismo se eleva a los 90.000. Por ello, Ramírez ha señalado que van a solicitar una nueva ayuda para poder financiar las obras.

La archicofradía va a pedir otra subvención de 45.000 euros para desarrollar el proyecto

El hermano mayor ha hecho estas declaraciones durante la presentación de las obras que se van a llevar a cabo en la carretera de acceso hasta el santuario, unas actuaciones para las que era necesaria la coordinación con la Diputación –que se va a encargar de las mismas– y también el Ayuntamiento.

Así las cosas, el diputado provincial de Cooperación con los Municipios, Maximiano Izquierdo, ha avanzado que la empresa adjudicataria de las obras –la firma lucentina Aroan– ultima ahora con el jefe de servicio de Carreteras de la institución provincial el plan de obra para que puede ejecutarse en su totalidad en un plazo de 30 días a partir de la Bajada de la Virgen de Araceli.

Eso significa que una vez que concluyan las fiestas aracelitanas y la Virgen regrese al Santuario –que tienen lugar durante más de un mes– las actuaciones estarían acabadas.

Una actuación integral en la carretera

Al detalle, estos trabajos consistirán en una actuación integral en la totalidad de la carretera, incluyendo limpieza y mejora de cunetas, el recubrimiento de los tramos donde el paso de las aguas de lluvia es patente provocando daños, la señalización vertical y horizontal de la carretera y el asfaltado con una nueva capa de pavimento que mejore la comunicación y la seguridad vial en esta infraestructura.

Izquierdo ha anotado que finalmente se han decantado por estas fechas para evitar mayores problemas, ya que es una carretera transitada por muchos vehículos y muchas personas a lo largo del año, pero no sólo para visitar a la Virgen de Araceli, sino también para practicar deporte.

No obstante, ha destacado que la carretera sólo permanecerá cortada mientras se lleven a cabo las labores de alquitranado. Además, la intervención en la carretera no impedirá el traslado de materiales ni el acceso al santuario, en el que las obras previstas supondrán la mejora de la accesibilidad al recinto.

El alcalde de Lucena, Juan Pérez (PSOE), por su parte, ha agradecido la buena disposición tanto de la Archicofradía como de la Diputación a la hora de coordinar el dispositivo para que ambas intervenciones se den en el menor tiempo posible y con la máxima garantías en materia de seguridad, dado que la carretera hasta el Santuario es una vía muy utilizada por los lucentinos también para la práctica de senderismo y de acceso a otras actividades de ocio en plena sierra.