Si de chico te gustaban los aviones, probablemente te hagas piloto, dice Gustavo Almagro, aeromodelista y patrono de la Fundación Sebastián Almagro que, junto al Club de Aeromodelismo de Palma del Río y Pegasus Aero Group, realizan todos los años el Festival de Aeromodelismo, que ha reunido a 31 pilotos en esta edición.

Jets con turbinas de reacción, réplicas exactas de las de aviación civil y militar, aviones acrobáticos, maquetas militares y, como novedad este año, un modelo 4D capaz de sujetarse de la hélice y volar marcha atrás han surcado los cielos de Palma del Río en la edición IX del Festival de Aeromodelismo Memorial Sebastián Almagro durante todo el fin de semana.

El aviador y campeón mundial de acrobacia aérea Sebastián Almagro le regaló un avioncito a su nieto cuando era chico. Tal fue la emoción del niño que, al llegar a casa, su padre, Gustavo Almagro, desempolvó su viejo hobby y empezó a construir modelos para volar con su pequeño.

El aeromodelista y patrono de la Fundación Sebastián Almagro cuenta que comenzó a salir a eventos dentro y fuera de España “y me di cuenta de que en Andalucía no había mucho que ver al respecto”. Entonces decidió que podía intentar hacer algo parecido. Sin embargo, tratar de hacer un festival de tal importancia sin apoyo era imposible; entonces contactó con el Club de Aeromodelismo de Palma del Río, que acababa de ser creado, y así surgió el festival hace ahora nueve años.

Al principio fue un experimento. Almagro reconoce que tenía miedo de que fuera un fracaso. “La primera edición no fue muy grande, fueron 16 pilotos; eso sí, todos increíbles”, recuerda Almagro. El nombre del festival surgió “de forma natural” desde el propio club y fue aprobado por unanimidad. “Yo no buscaba notoriedad”, dice, “pero hacerle un homenaje a mi padre es una enorme muestra de agradecimiento”.

El presidente del club de Aeromodelismo de Palma del Río, Manuel Palomero, afirma que el aeromodelismo de Córdoba es de alto nivel. “Intentamos traer lo mejor de cada especialidad, las más espectaculares pues el público así lo demanda”. Palomero lo define como un deporte ciencia. “Los pilotos se involucran en la creación de sus modelos; saben desde Física, Matemáticao, aerodinamismo hasta carpintería y pintura”.

Este año ha repetido con su vuelo Raquel Bellot, la primera mujer en participar en el festival y la única mujer piloto de helicópteros de radio control en España. “Estoy muy acostumbrada a ser la única en festivales y competiciones de aeromodelismo”, dice Bellot. “Me siento integrada totalmente en este mundo que es mayoritario de hombres”. Sin embargo, admite que “actualmente hay algunas mujeres y niñas que se han inspirado en vuelos míos para introducirse también en este hobby”.

Contrario a lo que se pueda pensar, Bellot admite que ser la primera mujer y además tener un nivel alto de vuelo le abrió puertas rápidamente para viajar a otros países a competir y hacer exhibiciones.

Además, este año ha asistido a Palma del Río por primera vez Pablo Consejo, un joven piloto con diversidad funcional que, según destaca la propia organización, “vuela maravilloso, es muy capaz y digno de admiración”.