La Junta de Andalucía continúa trabajando en los informes de valoración de los daños producidos en el yacimiento arqueológico de Almedinilla. No hay novedades en el asunto, pero la delegada territorial de Patrimonio Histórico, Cristina Casanueva, ha asegurado este viernes que la zona no estaba declarada como yacimiento. 

El director del Museo Histórico de Almedinilla, Ignacio Muñiz, denunció hace unos días ante la Guardia Civil los daños producidos en en la zona de la Viñuela de esta localidad. Según detalla, una máquina de grandes dimensiones para remover la tierra y plantar olivos ha destruido un yacimiento arqueológico de siglo I antes de Cristo en el término municipal de Almedinilla.

Los agentes están investigando los hechos y, en el proceso, han requerido a la Delegación de la Junta de Andalucía un informe de valoración. La delegada ha indicado que todavía no hay novedades sobre los hechos y daños ocurridos, pero ha adelantado que "no es un yacimiento que estuviera detectado por la Delegación de Cultura en ninguno de los catálogos que tiene la Consejería donde se van inscribiendo los distintos yacimientos que se van detectando". Casanueva ha asegurado que había un desconocimiento total por parte de la administración acerca de esta zona, y que ha sido a raíz de la denuncia "cuando nos hemos enterado de que ahí había hallazgos".

Desde la Administración tampoco tenían conocimiento de las actuaciones que el Ayuntamiento estaba llevando a cabo en la zona junto con la Universidad de Granada. Además, la delegada ha informado que "estaban trabajando sin autorización de la Delegación Territorial".

El yacimiento estaba en estudio por parte del Museo Histórico de Almedinilla y la Universidad de Granada, y se habían realizado en febrero de 2021 las planimetrías para próximamente ser comunicados los resultados a la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, según la institución municipal.

De hecho, como ya se había informado, la denuncia parte del Ayuntamiento "porque estaban haciendo esos estudios y es por eso que se dan cuenta que la persona que había comprado la finca, al hacer las labores agrícolas, destruye parte de un yacimiento", añade Casanueva.

El arqueólogo municipal comprobó, según la denuncia, que el muro principal del recinto "ha quedado totalmente arrasado" supuestamente con máquinas pesadas para plantar una docena de olivos. En el entorno quedan quedan algunas piedras desgajadas del muro, algunas ciclópeas, así como fragmentos cerámicos ibéricos tardíos: ánforas ibero-púnicas, cuencos, lebrillos…

La junta de Andalucía, según ha informado la representante, está trabajando en el procedimiento durante estos meses, junto a los técnicos especializados, "ahora mismo, centrados en los informes que ha pedido la Guardia Civil a la Administración".