La Bienal de Arte de Villa del Río 2025 ya tiene su primer Maestro de Honor y cartel

Alto Guadalquivir

El escultor e imaginero cordobés Antonio Bernal estará presente en la décima edición de una cita que presenta una obra del artista local Javier Tarín

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El escultor e imaginero Antonio Bernal, escoltado por su discípulo Sebastián Montes y el alcalde villarrense, Jesús Morales.
El escultor e imaginero Antonio Bernal, escoltado por su discípulo Sebastián Montes y el alcalde villarrense, Jesús Morales. / El Día
C. L.

Villa del Río, 20 de julio 2025 - 21:10

La Bienal de Arte de Villa del Río, que este 2025 cumple su décima edición, ya vive en su cuenta atrás. La cita, que se celebrará del 26 de septiembre al 19 de octubre, ya ha presentado a su primer Maestro de Honor, que será el escultor e imaginero cordobés Antonio Bernal, además de desvelar el cartel, obra del artista local Javier Tarín. El encuentro reunirá pintura, escultura, fotografía artística, arte urbano y, como novedad este año, diseño de moda, en una clara apuesta por el fomento del talento local y el intercambio creativo con artistas invitados.

El área de Cultura del Ayuntamiento ha comunicado este domingo que el escultor e imaginero cordobés Antonio Bernal Redondo será uno de los Maestros de Honor de la X Bienal de Arte de Villa del Río 2025, a propuesta de su discípulo, el también escultor e imaginero Sebastián Montes Carpio.

Bernal, natural del barrio de San Basilio de Córdoba, es uno de los grandes referentes de la imaginería sacra andaluza en la actualidad. Su obra, caracterizada por una profunda expresividad y un cuidado exquisito en la talla y la policromía, hunde sus raíces en el barroco más emocional y se ha extendido por toda España y el extranjero. Entre sus creaciones más reconocidas destacan el Nazareno de Adamuz, el Descendimiento de Montilla, el Cristo de la Sangre de Murcia o el Cristo de la Piedad de Las Palmeras, entre muchas otras.

En esta décima edición de la Bienal de Arte villarrense se podrán contemplar varias de sus obras, que dan muestra del talento y la sensibilidad de un artista que ha sabido renovar la tradición imaginera con una mirada contemporánea.

La confirmación de Antonio Bernal como Maestro de Honor viene a completar una semana cargada de novedades en torno al certamen villarrense. Porque hace sólo unos días se presentó oficialmente el cartel anunciador de la cita, obra del artista local Javier Tarín Sánchez. Fue en un acto presidido por el alcalde y responsable de Cultura, Jesús Morales, que estuvo acompañado por el autor; el comisario de Cultura, Antonio Lara; y diversos artistas y personas relacionadas con el ámbito de la cultura local, que mostraron su apoyo y compromiso con esta décima edición de una cita que celebra una década de impulso artístico en el municipio.

Cartel de la X Bienal de Arte de Villa del Río 2025.
Cartel de la X Bienal de Arte de Villa del Río 2025. / El Día

Javier Tarín quiso mostrar su agradecimiento por poder aportar su trabajo "a un evento tan representativo" como la Bienal. "He desarrollado varias propuestas en las que he intentado involucrar a todas las personas que me han sido posibles de las que viven y trabajan en torno al arte y la cultura en nuestro pueblo. Si bien me he quedado con ganas de que fuesen muchos más, estoy contento de ver que nacen procesos como la comisión de Cultura que se ha llevado a cabo para este evento y que, en el futuro, espero den sus frutos y faciliten una realidad más comunitaria y con más alternativas en nuestra localidad", ha señalado.

Sobre el cartel, el artista destacó que "XBA es, como también VDR, un acrónimo con identidad" en el que "las tres letras que lo componen, junto a esta mano articulada, ejercen de eje visual para esta composición que será la imagen de la X Bienal de Arte de Villa del Río". "En la mano he querido expresar el reflejo del artista en su contexto y en sus herramientas, como también reflejar el diálogo tan trepidante que en esta era digital vivimos en torno a este tema. En torno al baile de ambos elementos que hacen de núcleo, se mueven texturas evocadoras y un contraste entre la suavidad de una gama más pastel y tres colores que ejercen de luz. Colores que se enfrentan y a la vez se abrazan. Cigüeñas, una por cada letra, que nos hacen mirar a nuestro cielo y pensar como pueblo. Y por último, manteniendo el equilibrio y ejerciendo el importante papel de comunicar, la tipografía que he moldeado para el nombre de nuestro evento. El proceso sigue vivo y continúa, este cartel es solo uno de sus latidos", ha finalizado el autor.

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