La Guardia Civil ha detenido en Priego de Córdoba a M. G. C., de 49 años y vecina de Almedinilla, acusada de haber robado 10.000 euros y numerosas joyas en el domicilio donde trabajaba como limpiadora. El instituto armado ha informado de que la propietaria de la vivienda denunció que varios desconocidos habían roto la vidriera de la puerta de entrada a su domicilio, habían entrado en la casa y, tras revolver la ropa y enseres del dormitorio, se habían marchado sin que al parecer, en una primera inspección, la denunciante hubiese notado la falta de algún efecto.

Los agentes se trasladaron al lugar indicado e iniciaron las gestiones para detener a los autores del robo. Sin embargo, al día siguiente, la denunciante descubrió que de una cómoda de su dormitorio, que creía que estaba cerrada con llave, faltaban 10.000 euros y numerosas joyas, por lo que amplió la denuncia.

Las primeras gestiones permitieron saber a la Guardia Civil que las joyas sustraídas podían estar en un domicilio de Almedinilla, en el que habitaban varías personas extranjeras. Los agentes se trasladaron a la casa y, tras obtener la autorización de los moradores de la vivienda, entraron. Tras una primera inspección encontraron en el suelo, junto a la puerta de una de las habitaciones, una bolsa pequeña que contenía las joyas sustraídas.

Ante este hallazgo, pidieron a los habitantes que acreditasen la procedencia de las joyas, pero no pudieron, al tiempo que todos manifestaron su sorpresa ante tal hallazgo, de forma que los agentes comprobaron que no estaban involucrados en el robo. Con posterioridad, la Guardia Civil localizó a dos testigos del robo, que aportaron datos suficientes que permitieron averiguar que la presunta autora había sido M. G. C., quien trabajaba como limpiadora en el domicilio desde hacía tres meses y conocía la existencia de las joyas y el dinero sustraído.