Mientras un frente lluvioso empieza a dejar precipitaciones en el Norte de la Península Ibérica, la cuarta ola de calor del verano se empeña en quedarse en Córdoba. Y es que tanto la capital como la provincia han vivido una de las peores noches en lo que va de verano, con los termómetros por encima de los 30 grados centígrados durante buena parte de la madrugada.

Tampoco ayudaron a conciliar el sueño las rachas de aire caliente, que más que refrescar las casas las recalentaban como si en las ventanas hubiera secaderos de pelo gigantes. Los aires acondicionados zumbando en las fachadas han sido la tónica dominante de una noche que se ha despertado con cansancio y ojeras por la dificultad para conciliar el sueño.

Según los registros oficiales de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), a medianoche aún había en Córdoba capital 35 grados centígrados, que subían a 35,5 a la 01:00. Hubo que esperar a las 03:00 para que la temperatura cayera de la barrera de los 30, con 28,1 grados. La mínima de la jornada ha sido a las 08:00, con 21,9 grados centígrados.

Lo vivido en Córdoba supera el nivel de las noches tropicales, que según la Aemet son aquellas en las que la temperatura no baja de los 20 grados, y se acercaría más al concepto de noche tórrida o ecuatorial, aquellas cuya temperatura mínima es de 25 grados o superior. También se está empezando a usar la expresión noche infernal para las noches en las que la temperatura no baja de los 30 grados.

En Aguilar de la Frontera había 30,9 grados a la 01:00; en Benamejí, 29,7; en Cardeña, 29,1; en Espiel, 25,5; en Fuente Palmera, 33,3; en Hinojosa, 29,4; en La Rambla, 28,6; en Montoro, 25,4; en Priego de Córdoba, 31,2, y en Valsequillo, 28,2 grados centígrados.