Tres profesionales sanitarios han sido víctimas de una agresión en el Hospital Valle del Guadiato, ubicado en el municipio de Peñarroya-Pueblonuevo, según ha informado la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Córdoba.

En concreto, las víctimas de una agresión por parte de una usuaria han sido tres profesionales sanitarios: un enfermero, una médico y una enfermera; los hechos ocurrieron el pasado 27 de septiembre.

Ante estos hechos, desde el Área Sanitaria Norte de Córdoba han querido expresar su más enérgica repulsa ante "los inaceptables acontecimientos" ocurridos en días pasados en el Hospital Valle del Guadiato. 

En palabras de la directora gerente, Ana Leal, "la misión de nuestros profesionales de la salud es insustituible y vital para nuestra comunidad, es esencial que todos, como sociedad, colaboremos para asegurar que esta labor crucial se realice en un entorno de respeto y comprensión mutuos".

Leal ha querido dejar claro que condena firmemente cualquier forma de violencia, especialmente cuando se dirige hacia aquellos que están dedicados a cuidar de la salud y el bienestar de los demás. En ese mismo sentido han declarado que "no podemos permitir que actos de agresión queden impunes y sin consecuencias".

La gerente del Área, en representación de todo el equipo directivo, ha expresado su sincero deseo de que situaciones como esta no se repitan en el futuro, y ha querido recordar "la importancia de que todos, como sociedad, trabajemos de manera conjunta y decidida para garantizar que nuestros profesionales sanitarios puedan llevar a cabo sus responsabilidades en un entorno seguro y libre de violencia".

Por último, ha querido reafirmar el compromiso inquebrantable del Área de velar por la seguridad y el bienestar de aquellos que prestan sus servicios en la administración sanitaria, e incidir en la posición de tolerancia cero ante la violencia.

Desde la unidad de prevención de riesgos laborales del Área, por su parte, han reseñado que los profesionales cuentan con el apoyo de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y los recursos contenidos en el plan de prevención y atención frente a agresiones a profesionales del sistema sanitario público de Andalucía. En ese mismo sentido, han querido recordar que las agresiones a los profesionales sanitarios están consideradas como atentado a la autoridad.

Más medidas de seguridad

Ante esta nueva agresión, CSIF ha mostrado su más firme condena y repulsa y ha reclama a la Delegación de Salud y Consumo que incremente las medidas de seguridad en los recintos sanitarios ante el elevado número de los ataques, tanto físicos como verbales, que sufren los profesionales, así como un aumento del personal en atención primaria y en los centros hospitalarios para evitar estos desagradables episodios.

El sindicato ha recordado que, según los datos oficiales publicados por el Servicio Andaluz de Salud (SAS), en 2022 se registraron 133 agresiones en Córdoba, 7 de ellas de carácter físico, y 126 de naturaleza verbal.

No obstante, durante los meses de este verano y, según también datos del SAS, en la provincia de de Córdoba se han registrado más de una quincena de agresiones.

La responsable del Sector de Sanidad de CSIF Córdoba, María Maestre, destaca que “es urgente una mayor dotación de personal en los centros para evitar los episodios conflictivos que se producen ante colapsos en el sistema sanitario por un incremento de la atención a los usuarios y de la sobrecarga asistencial”.

CSIF ha reclamado al SAS que el nuevo Observatorio de Agresiones a Profesionales del Sistema Sanitario Público Andaluz ofrezca información concreta de la gestión de los centros sanitarios en el momento que se produce la agresión al trabajador o trabajadora.

Además, “lamentablemente muchas agresiones que se producen todos los días no se comunican y por ello no se reflejan en la estadística”, ha explicado Maestre, quien ha detallado que “esto último se produce habitualmente por miedo a represalias del usuario o sus familiares en centros pequeños y consultorios, y otras, porque los propios profesionales de la sanidad están normalizando estas conductas inaceptables, asumiéndolas como algo más, en el día a día de su trabajo”.

CSIF Sanidad Córdoba ha reiterado al SAS su petición de incluir un régimen sancionador en la Ley de Salud Pública de Andalucía, una petición histórica del sindicato y que “seguimos esperando de la Administración sin que hasta el momento tengamos conocimiento del estado en el que se encuentra”.

La central sindical entiende que la Administración debe incoar un expediente administrativo e imponer sanciones adecuadas a los agresores que incluyan además una pena económica, puesto que para el sistema estos episodios de violencia suponen también un alto coste al tener que sufragar servicios jurídicos, daños materiales y las bajas profesionales, entre otras consecuencias. Esta propuesta de CSIF sería una medida disuasoria frente a estas conductas reprobables e intolerables.