"Lo que más me apetece a día de hoy es aprender a hacer otras cosas"

Francisco Nixon. Cantante

El asturiano, cuyo último disco es 'Lo malo que nos pasa', presentará el próximo domingo en Modo el documental 'Salir de casa', protagonizado por él y dirigido por David Trueba.

Francisco Nixon (Francisco Javier Fernández Martínez), entre canciones y carreteras.
Alfredo Asensi Córdoba

30 de septiembre 2016 - 05:00

Cosmopoética recibirá el próximo domingo a Francisco Nixon (Gijón, 1971), excomponente de Australian Blonde y La Costa Brava y entre cuyos discos en solitario figuran El perro es mío y Lo malo que nos pasa. Es el protagonista del documental Salir de casa, dirigido por David Trueba, que será proyectado en Modo (22:00).

-¿Cómo surgió la idea de hacer este documental? ¿Y qué tipo de documental se quería hacer, a partir de qué conceptos?

-La idea de hacer el documental surge por iniciativa de David Trueba en una tertulia que organiza el periodista asturiano Eduardo Galán. En una de esas comidas yo comenté que mi nuevo disco, Lo malo que nos pasa, se iba a fabricar en vinilo en la República Checa, y David nos propuso rodar todo el proceso. La idea inicial era salir desde Madrid en coche y volver a casa con el vinilo en las manos, pero no pudimos conseguir los permisos para grabar en la fábrica. Así que el proyecto estuvo parado hasta que, gracias a los chicos del sello El Genio Equivocado, descubrimos que unos chavales se habían montado una fábrica de vinilos en Castellón. Contactamos con ellos y estuvieron encantados en colaborar, con lo que nos pusimos de nuevo manos a la obra y, partiendo de la idea original de hacer una road movie, trazamos un itinerario por diversas ciudades españolas en las que pudiéramos entrevistarnos con amigos que estuvieran haciendo cosas interesantes. No quería que el documental hablara solo de mí, eso me resultaría aburrido. En otro sentido, el documental trata acerca de cómo la economía digital, que ha destruido tantos mercados locales, paradójicamente ha supuesto la revitalización de ciertos oficios artesanales, el recurso al autoempleo, el trabajo manual, etcétera. También quería mostrar las similitudes entre los procesos artísticos y los industriales mediante comparaciones entre, por ejemplo, una fábrica de vinilos y una fábrica de aceite de oliva. Y finalmente, como tercer aspecto importante, la idea de que uno nunca triunfa solo, sino que siempre lo hace en compañía de otros. Lo que quisiera dejar claro es que se trata de un proyecto muy modesto en todos los sentidos, tanto de medios como de expectativas, fruto de la generosidad de David Trueba.

-Una de las ciudades que aparecen es Córdoba. ¿Cómo fue el rodaje aquí?

-Quise ir a Córdoba porque nos quedaba a mitad de camino entre El Puerto de Santa María y Madrid, y porque tengo buenos amigos allí: Álvaro Tarik y Fernando Vacas, la gente de El Astronauta, La Bicicleta, La Boca… La entrevista a Fernando y Álvaro es una de mis partes favoritas del documental. Visto en retrospectiva, creo que todas las entrevistas deberían haber sido como esa, con tiempo para cada entrevistado, en lugar de juntar a demasiadas personas en torno a una mesa. Pero eso en parte también fue debido a las limitaciones de tiempo. Solo teníamos unas horas en cada ciudad para poder hacer entrevistas antes de irnos a la presentación de un libro o a un concierto. Eso no sale en documental, pero aparte de mis conciertos, David Trueba iba presentando su última novela, Blitz, y eso hacía que muchas veces no pudiéramos dedicar todo el tiempo deseado a los entrevistados.

-Salen muchos personajes con los que se va relacionando en las distintas ciudades. Cuentan lo que hacen, anécdotas, proyectos... Es un homenaje a la gente que hace cosas por ilusión, por vocación, más allá del rendimiento económico…

-Como te comentaba al principio, la idea del documental, más que ser un elogio desproporcionado de mi persona, o un resumen de mi trayectoria, era poder dar voz a un montón de gente de mi entorno que hace cosas relacionadas con la creación desde una perspectiva artesanal. Yo soy un gran fan de muchas de las cosas que hacen mis amigos, o al contrario, me he hecho amigo de muchas personas de las que empecé siendo fan. Vuelvo a insistir: de lo que más me arrepiento es de no haber podido dedicar más tiempo a cada uno.

-También es interesante y pedagógico el reflejo de una forma de vida, la del músico que va de ciudad en ciudad, con su guitarra al hombro, con su GPS, conociendo gente variopinta, tocando en bares en los que cuesta que la gente se calle…

-Ese es tal vez el punto de vista más personal de David, la idea del músico callejero, el ruido de los bares, el paisaje español visto como un descampado… Esas son todas ideas de montaje de David.

-¿Cómo será el acto del domingo en Córdoba?

-Haremos una pequeña presentación del documental seguida de la proyección, tras la cual habrá un turno de preguntas en el que seguramente toque algunas canciones.

-¿Para cuándo un próximo disco?

-De momento no tengo previsto publicar nada, acabo de ser padre hace poco y entre eso y el trabajo apenas tengo tiempo libre. Espero poder retomar la música más adelante, pero nunca se sabe.

-¿Por qué siempre es el cumpleaños de alguien?

-Es una frase de cuando fui a vivir a Madrid. De repente, cuando llegaba el fin de semana siempre había que ir a una fiesta. Cuando eres joven, estupendo, pero a medida que te vas haciendo mayor prefieres quedarte en casa. La canción trata de eso, del hecho de hacerse mayor. Es algo que también se ve reflejado en el título del documental, Salir de casa, que a su vez hace referencia a una canción y al título del disco, "lo malo que nos pasa es por salir de casa". Trata acerca de lo que supone crecer en público haciendo kilómetros, y el desgaste que eso conlleva. Como digo en el documental, a día de hoy lo que más me apetece es aprender a hacer otras cosas.

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