Justicia ajustada
Crítica de Teatro
El JuradoHHHHH
Compañía: Avanti Teatro. Autor: Luis Felipe Blasco Vilches. Reparto: Josean Bengoetxea, Víctor Clavijo, Cuca Escribano, Pepón Nieto, Isabel Ordaz, Canco Rodríguez, Luz Valdenebro, Eduardo Velasco, Usun Yoon. Dirección: Andrés Lima. Fecha: sábado 12 de noviembre. Lugar: Gran Teatro. Lleno.
Un Gran Teatro a rebosar recibió el pasado sábado con expectación El jurado, la nueva propuesta de Avanti Teatro con un reparto de gala bajo la dirección de Andrés Lima. Teniendo como referencia la magistral obra de Reginald Rose Doce hombres sin piedad que, tras pasar por televisión y el escenario quedaría inmortalizada en la gran pantalla de la mano de Sidney Lumet con Henry Fonda como protagonista, Luis Felipe Blasco Vilches confecciona una historia más cercana al contexto actual y que por desgracia se está convirtiendo en ración diaria de nuestros informativos: un juicio por corrupción. El jurado popular compuesto por cuatro mujeres y cinco hombres que representan los sectores más variopintos de nuestra sociedad permanecen aislados en una habitación obligados a ejercer justicia con su voto, un voto que en el trascurso de la obra cambiará de un lado de la balanza a otro, demostrando cómo la justicia puede ser muy clara cuando el dedo acusador está en nuestra mano pero algo más relativa si el dedo señala hacia nuestros actos.
La caja negra queda dividida por luz blanca en dos zonas: el exterior, donde los personajes comparten vivencias, y otro central presidido por la tarima giratoria con una mesa y nueve sillas en el que discuten sobre la culpabilidad del acusado. Esta disposición simboliza varias ideas en torno al espacio en el que se debe ejercer justicia: transparente, sin artificios ni escondrijos y dominado por la austeridad. Un lugar que al final queda ultrajado por las circunstancias personales de casi todos los protagonistas. La obra coral siempre mantiene el ritmo e intensidad necesaria y no hay duda de que Andrés Lima es parte responsable de ello, sabiendo orquestar con precisión a este fenomenal conjunto de actores y actrices, quienes de principio a fin convencen al espectador con su trabajo impecable y entre los cuales es difícil destacar a alguien sobre el resto. Sin embargo, debemos hacer una mención especial a Pepón Nieto, sensacional en su papel de abogado del diablo, Isabel Ordaz con su entrañable ama de casa y, cómo no, nuestra querida paisana Luz Valdenebro en el rol de trabajadora social.
El jurado hace una llamada de atención al papel que nuestra sociedad desempeña a la hora de reclamar justicia y cómo ésta, además de ser lenta, adquiere distintos raseros y es manipulada al antojo de quienes se aprovechan de la debilidad de sus votantes. Gracias a ello, estar libre de pecado para lanzar la piedra resulta altamente complicado. Un argumento milenario que hoy todavía sirve para así poder justificarse. La mayoría juega sus cartas para vivir lo mejor posible mientras ocultan los muertos en el armario. Lo que parece diferenciar a unos de otros es el tamaño del mismo.
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