Las mayores curiosidades de la Feria de Córdoba: un alcoholímetro, un 'chatbot' y hasta botellas de Moët & Chandon

La Feria de Córdoba está repleta de novedades en este 2025. Una de las que más está llamando la atención es el alcoholímetro que está instalado entre el recinto ferial y el parking privado ubicado al otro lado de la A4. No todos los que han ido a la Feria estos días lo han visto, pues está algo escondido y retirado de las 83 casetas que hay repartidas por todo El Arenal. Cuando cualquiera cruza por el carril de emergencia de arena hacia los aparcamientos, justo por debajo del puente de la autovía, se encuentra dos máquinas del tamaño de una persona en las que pone "alcohol test".

Se trata de dos alcoholímetros que puede usar cualquier a módico precio de un euro. "Inserte un euro en la ranura. Recoja la boquilla, insértela y sople de forma continuada hasta que la máquina avise. Espere hasta que la máquina muestre el resultado". Con esas simples instrucciones, quienes vayan a la Feria en su vehículo pueden ahorrarse un disgusto en la carretera. Una novedad que seguro ya ha salvado de ponerse en peligro a más de uno durante las primeras jornadas festivas.

Hay más novedades en ese Arenal que se convierte durante varios días en una miniciudad paralela a Córdoba donde la fiesta y la alegría están garantizadas. Este 2025, la Feria cuenta con un nuevo servicio de información puesto a disposición pública de forma gratuita. Se trata de un sistema de inteligencia artificial que funciona como un chatbot si los usuarios contactan a través de WhatsApp al número 621074311. Mediante este sistema que ha desarrollado la empresa cordobesa BlackIA, los visitantes podrán consultar cualquier información sobre la festividad: ubicaciones, actuaciones, horarios, etcétera.

¿Se te ha roto tu vestido de gitana durante la Feria? Eso tampoco es un problema. Eso tiene fácil solución, pues el recinto ferial cuenta otro año más con un servicio de costura gratuito. Las voluntarias de la obra social Adoratrices están instaladas junto a la Portada en la Feria en horario de 13:00 a 15:00 y de 16:30 a 21:00 para solucionar los posibles descosidos o roturas de trajes de gitana que sufran las visitantes durante la celebración.

En lo que a consumo se refiere, la gastronomía cordobesa manda en las casetas. Las patatas asadas, las hamburguesas y los bocadillos se venden como churros en los puestos en las calles del recinto. Y para beber, el Pedro Ximénez dulce y el rebujito son las grandes estrellas, además de las bebidas clásicas como refrescos, cerveza y los combinados de todo tipo. Sin embargo, hay una bebida alcohólica que ya se está extendiendo por la Feria de Córdoba y que sorprende a muchos.

Esa es el Moët & Chandon. El champán francés ha llegado a casetas como Las Matildes, donde se vende a un precio de 90 euros la botella. "No se vende mucho a diario, fue más el fin de semana primero de Feria o cuando la gente más mayor quiere celebrar algo", señalan los camareros de la caseta Las Matildes (calle Los Patios, 2), encantados por esta novedad que se ha mezclado también con la tradición del Mayo Cordobés.