El debate sobre el cambio de nombres en el callejero ha sido, sin duda, uno de los que más polémica ha generado durante estos años. El cogobierno ha aprobado la modificación del nombre de aquellas vías cuyo significado se relacionara con la represión franquista, atendiendo a la Ley de Memoria Democrática de Andalucía. Aprobado el cambio, sólo se ha ejecutado la modificación de dos calles, mientras que las más significativas, como Cruz Conde o Vallellano, aún no lucen los nuevos letreros.

La medida ha llegado a enfrentar a los dos partidos de gobierno, que también han tenido en contra al PP, que no respalda los cambios. De momento, la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) ya ha dado traslado a las instituciones pertinentes en la materia, por lo que los cambios deberían seguir adelante.

PP

PP ya ha dejado clara su postura con respecto a este tema desde que se aprobó el cambio de nombres del callejero. Los populares dicen que “Cruz Conde, Vallellano y Cañero mantendrán el nombre que han tenido hasta ahora”. Y es que, para el PP, estos debates, que surgen a raíz de la aplicación de la Ley de Memoria Democrática, son “estériles e inútiles” y se debe “dejar de perder el tiempo”.

PSOE

El PSOE ha sido uno de los artífices del cambio de callejero. Haciendo valer la Ley de Memoria Democrática, el Ayuntamiento, con el PSOE e IU a la cabeza, han llevado a cabo una serie de medidas encaminadas a eliminar cualquier resquicio franquista de las calles de la ciudad. Por esto, los socialistas insisten en que seguirán trabajando para que la citada ley se cumpla, así como el dictamen aprobado en Pleno en relación a dicha normativa. Eso sí, a pesar de que el cambio de nombres se aprobó hace meses, el Ayuntamiento sólo ha cambiado dos calles y no se espera que antes de las elecciones se vayan a ver nuevos rótulos.

IU

El partido recuerda que “las víctimas necesitan justicia, verdad y reparación”; por esto, se compromete a cumplir con los acuerdos adoptados, “de manera democrática y participativa”, en materia de memoria democrática, y eso pasa, entre otros asuntos, por cambiar el callejero. IU asegura que, de volver a ostentar cargos, cambiará el nombre de las calles. No se puede olvidar, en este caso, que fue IU quien pidió directamente que se cambiara el nombre de dos calles (los únicos hasta el momento) para celebrar un acto electoral. Este hecho supuso, entre otras cosas, un cruce de duras acusaciones entre los dos partidos del cogobierno actual.

Ciudadanos

Ciudadanos defiende que su postura con respecto al cambio del callejero es clara: “tenemos que cumplir la legalidad en cuanto a la Ley de Memoria Democrática”, algo que, añade la formación naranja, “hemos mantenido desde el grupo municipal”. En cuanto a los nombres que se le den a las nuevas calles, Ciudadanos dice que hay que “buscar el consenso” y “dejar a un lado la ideología política”. Todo ello, apuntan, “para que no cambien los nombres de nuestras calles cada vez que cambie el gobierno municipal”.

Podemos

Podemos defiende que su presencia en Capitulares “será la mejor garantía para el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica”. Por lo tanto, la formación morada asegura que apostará por el cambio de nomenclatura de las calles “en favor de otros colectivos o personas” ya que, justifican, “entendemos que personas que fueron hacedores de un golpe de estado no tienen que tener un reconocimiento público en el nombre de una calle”.

Vox

La postura de Vox en cuanto al cambio de nombres en el callejero es clara, no quiere tal cambio. Por esto, el partido dice que restablecerá los nombres de calles y barrios “atropellados por el revanchismo ideológico de la izquierda”. Para Vox, “no es una prioridad ni la lucha de clases, ni la lucha de géneros, ni la lucha de memorias históricas” y añaden que “ayudaremos siempre a la reparación, pero nunca a la revancha”. El partido asegura que no va a dedicar “ni un minuto” a “ese camino que pretende socavar la convivencia y concordia entre españoles y cordobeses”.