De números, delanteros y los plazos de tiempo

Había decidido -y anunciado- estar en un segundo plano esta temporada. Pero Carlos González y el protagonismo mediático van de la mano. Al presidente del Córdoba le gusta, disfruta, darse sus paseos por los diferentes medios -los locales algo menos- para hablar de lo divino y de lo humano. Así que aprovechando el nuevo carrusel de líos en torno a la entidad blanquiverde por culpa del cobro de la entrada al bebé y la disputa con Rafael Gómez por ver de quién es la Ciudad Deportiva sobre la que ya ha realizado obras el club, el mandatario defendió la política de fichajes en la construcción de la actual plantilla. Y lo hizo admitiendo la desesperada y fallida búsqueda de un delantero hasta el último momento del mercado de fichajes, con negociaciones llevadas por él mismo en algunos casos, que refleja que la directiva también está de acuerdo en que al grupo le faltan mimbres para poder pelear con las mayores garantías de éxito posibles por el objetivo del ascenso. Está claro que luego será la competición la que diga si la apuesta fue buena o no, pero por ahora...

En un nuevo paso por Canal Sur Radio, González enumeró la amplia nómina de delanteros que el Córdoba trató de convencer, con "gestiones por escrito" para formar parte de su proyecto. Pero ninguno aceptó porque "los buenos de Segunda quieren jugar en Primera y, o lo consiguen o se quedan en sus clubes, que no los van a vender a un competidor". En esa lista están los ya conocidos Roger Martí, por el que el Levante rechazó 1,2 millones para renovarlo, por lo que el sábado estará en el bando contrario en El Arcángel; David Rodríguez, que continuó en Alcorcón pese a una oferta de 1,5 millones; Álex Alegría, que decidió continuar en el Betis después del acuerdo entre clubes de un traspaso por valor de un millón con opción de compra al siguiente año, y Juan Muñoz, descartado tras el trato con el Sevilla por la exigencia de su representante de hacer un pack con Casado y Nauzet.

A esos hay que añadir a Borja Viguera, que se marchó al Sporting de Gijón tras haber decidido continuar en el Athletic hasta enero; el cordobés Sergio León, fichado por Osasuna, y dos hombres, "uno del Boro y otro del Watford" por los que negoció directamente el presidente y que tampoco vinieron porque su prioridad era jugar en una máxima categoría... o porque se llegó tarde. Y es que no es lo mismo apostar con esa fortaleza económica desde el inicio del verano, cuando ya se sabía que Florin Andone iba a salir, a hacerlo sobre la bocina, algo que habría que saber para calibrar los intentos.

Esos fueron algunos de los "más de 40 nombres" barajados por el CCF, según las palabras de Carlos González, que quiso dejar patente que "no es cuestión de dinero". Y así debería ser tras las ventas de Florin y Fidel por un montante total de 5,25 millones, aunque el mandatario recordó que hasta la fecha el club sólo ingresó 450.000 euros, casi la mitad por cada uno. Algo que puede llegar a entenderse en el caso del rumano, traspasado por 4,7 millones a un Deportivo intervenido que te garantiza el cobro, aunque sea a cuentagotas. Pero que es extraño con el pase de Fidel al Almería, un rival directo que sólo abona la mitad del medio millón indemnizatorio por uno de los futbolistas más determinantes de Segunda. Raro cuanto menos.