El Córdoba Patrimonio de la Humanidad sigue trabajando con la calma del parón que ofrece la competición por la disputa de los clasificatorios internacionales para el Mundial de Lituania, lo que ha ofrecido a su técnico, Miguel Ángel Martínez Macario, la posibilidad de preparar sesiones más exhaustivas y pulir detalles con sus jugadores.

"El equipo está bien, trabajando duro en estas semanas sin competición. Estamos teniendo tiempo para trabajar conceptos del juego e insistiendo en algunos detalles o situaciones que no puedes abordar todas las semanas porque te centras en el rival concreto", asegura Maca sobre el trabajo de su equipo durante este parón.

El preparador cordobés se mostró además contento porque "todo el mundo está entrenando súper bien", aunque el técnico tiene que lamentar la ausencia de Shimizu, convocado con la selección con Japón, y la de Zequi, de baja momentánea por un problema en el pubis, por lo que Maca sigue "pendiente de su evolución".

A pesar de todo, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad sigue "con la mente puesta en el Peñíscola, porque a pesar de la última derrota, el equipo volvió a dar la cara y creo que el resultado fue injusto". Y es que Macario piensa que "con ese nivel de juego, las victorias no van a tardar en llegar".

En ese choque ante el Peñíscola, que se jugará el sábado 15 de febrero en Vista Alegre (19:00), los blanquiverdes tendrán que poner "toda la carne en el asador para que los puntos se queden aquí", como reconoció el propio Macario, consciente de que la salvación de su equipo pasa por los partidos como local.