Algo está cambiando: marca al hombre en la estrategia

Los goles de Fran Vélez para el Almería y Brandon para el Mallorca a la salida de sendos saques de esquina fueron el detonante perfecto para que José Luis Oltra se decidiera a variar la forma de defender en la estrategia. La importante sangría sufrida por el Córdoba a balón parado en este inicio de campaña, arrastrada ya desde el pasado ejercicio, pedía un cambio que pudo observarse el pasado domingo en Anduva. Ante el Mirandés, los blanquiverdes pasaron a marcar al hombre y, si bien aún hay que perfeccionar el sistema, ya pudo verse una ligera mejoría que al menos permitió cerrar una vía de agua que había costado demasiados puntos.

Porque el Córdoba ha encajado en 15 jornadas hasta siete tantos a pelota parada, lo que supone un 38,8% sobre un total de 18. El problema era tan evidente que el propio Oltra admitió tras caer ante el Mallorca en El Arcángel que el marcaje zonal utilizado "estaba fallando", lo que le obligaba a buscar "cómo solucionarlo" con el objetivo de dar un primer paso para revertir la situación de crisis que azota al equipo desde finales del pasado mes de septiembre.

Así, en Anduva, el Córdoba enseñó su nuevo modelo. Y lo hizo pronto, pues ya en los primeros minutos el Mirandés acumuló un par de saques de esquina en los que la zaga visitante logró imponerse. Luego hubo alguna duda que permitió remates de Aurtenetxe, pero ante la mayor oposición de su par, el zaguero rojillo no supo dirigirlos a la portería. El resultado fue una leve mejoría sobre la que cimentar desde ahora un cambio que el equipo venía pidiendo a gritos.

El UCAM abrió esta sangría con un lanzamiento directo de Góngora que sorprendió a Pawel. A ese tanto hay que sumar los cinco con remates tras un córner, logrados por Aguilera (Huesca), Ignasi Miquel (Lugo), Cabrera (Zaragoza), Fran Vélez (Almería) y Brandon (Mallorca), más el de Pelegrín para el Elche que llegó dando continuidad a una falta lateral botada por Edu Albácar.

Siete tantos de 18 que dejan en nada la producción ofensiva blanquiverde en estas acciones a pelota parada, que se reduce a tres goles, todos con origen en la esquina: el de Alfaro al Tenerife y los dos de Caro para firmar empates con el Numancia y el Valladolid.