Julia Figueroa conquistó la medalla de bronce en el Grand Slam de Tel Aviv. La judoca cordobesa, en su primera cita internacional tras los Juegos Olímpicos de Tokio del pasado verano, se alzó con la tercera plaza tras deshacerse de la israelí Shira Rishony, su verdugo en la última cita olímpica. Gran premio para la del Terra i Mar, que repite el mismo éxito del año pasado en esta misma prueba.

A pesar de que se postuló para competir en -52 kilogramos tras lograr un bronce en el Nacional, Julia Figueroa retomó la competición internacional en la misma categoría de siempre, la de -48 kilogramos. Séptima del ranking mundial, la del Terra i Mar, segunda cabeza de serie, tenía el gran reto de conseguir una presea, objetivo a la postre conseguido.

Exenta de la primera ronda, Julia Figueroa se impuso en su primer combate a la alemana Nathalie Kolein, que se impuso previamente a la venezolana María Giménez. La cordobesa se alzó con el triunfo gracias a un yuko que subió al marcador tras ser revisado por el video y a su resistencia frente a la judoca germana. Con el billete a los cuartos de final, la del Terra i Mar se topó con la serbia Milica Nikolic.

En un duelo muy disputado, Nikolic se llevó el triunfo tras conseguir un ippon en el tiempo extra. De este modo, Figueroa se quedó sin opciones de optar al oro, aunque avanzaba hacia la repesca. Ahí se enfrentó a otra serbia, Andrea Stojadinov. La del Terra i Mar afrontó de la mejor manera el combate y se apuntó un gran triunfo tras hacer un ippon en el tramo final de una pelea que se le puso de cara tras obtener un yuko.

Tras este triunfo, Figueroa se clasificaba para disputar la pelea por la medalla de bronce. Ahí esperaba su verdugo en los Juegos Olímpicos de Tokio. La israelí Shira Rishony, que jugaba en casa y sólo cedió previamente ante la francesa Shirine Boukli -segunda del mundo y ganadora final de esta cita-, era el reto final por la presea. Y la judoca cordobesa no se arrugó y se vengó de lo sucedido el pasado verano en la cita olímpica. 

En un duelo muy parejo y disputado, Julia Figueroa, a pesar de tener dos shidos, no se vino abajo y logró en el tiempo extra un yuko que le valió para apuntarse la victoria ante Rishony y lograr así la medalla de bronce en el Grand Slam de Tel Aviv. Además, aunque sea en mayo cuando arranque el ciclo olímpico para París 2024, la cordobesa coge moral suficiente tras llegar más lejos que su compatriota Laura Martínez Abelenda, que cayó en la segunda ronda de esta prueba.