El Atlético Espeleño no levanta cabeza y cae ante el Rota (2-0)

El Atlético Espeleño sigue sin arrancar y cayó ante un Rota más efectivo de cara a puerta. Los de Juan Carlos Quero, que aún no han ganado y cierran la clasificación del Grupo X de Tercera RFEF con dos puntos, volvieron a acusar su falta de pegada en el Municipal Navarro Flores. Con este revés, los de Espiel, que tampoco están teniendo suerte, encajaron su segunda derrota consecutiva.

Tras caer ante el Ceuta B en casa, los rojillos, que tenían las bajas de Santacruz, Nacho Martín y Galisteo, buscaban darse una alegría en Rota. Para ello, Juan Carlos Quero hizo cambios en el once inicial respecto al anterior envite y dio entrada a Edu, Figueroa, Manuel, Diego y Adriano con el objetivo de revertir la situación que atraviesa el equipo.

Durante la primera mitad, los de Espiel estuvieron metidos en el partido y dispusieron pronto de su primera ocasión, pero el disparo de Álex Molina se fue por encima del larguero. Rozando el cuarto de hora de juego, el veterano Guille Roldán tuvo cerca el 0-1, pero no atinó a batir al meta local. Avanzaba el partido y los rojillos se encontraban cómodos en el Municipal Navarro Flores ante un rival que no inquietaba a Gonzalo.

En el tramo final de la primera parte, Guille lo volvió a probar, pero su lanzamiento se estrelló en el lateral de la red. Tampoco estuvo atinado Diego con un lanzamiento que se fue desviado. Así se llegó al descanso con las espadas en todo lo alto y los cordobeses estando muy vivos en el encuentro ante un Rota que no inquietó a Gonzalo.

Tras el paso por los vestuarios, todo cambió en un abrir y cerrar de ojos para el Atlético Espeleño. Manolo inquietó al meta gaditano. Acto seguido, vino un duro mazazo para los cordobeses. Sólo se llevaban seis minutos de juego cuando el Rota se adelantó gracias a un autogol de Antolín. La suerte no estuvo del lado de los de Juan Carlos Quero, que acusaron el golpe y encajaron el segundo gol de los locales en apenas cinco minutos.

Con el 2-0, los de Espiel buscaron reponerse de un duro golpe que fue clave para el devenir del envite. Juan Carlos Quero movió el banquillo y dio entrada a hombres de ataque como Tommy Montenegro y Juan Andrés. Los locales dominaban el partido ante un Espeleño que pudo acortar distancias ya en el descuento, pero Tommy Montenegro se topó con el palo de la portería gaditana. No hubo tiempo para más y los rojillos se quedaron de nuevo a cero.