LLUÍS TARRÉS. Terrorífico estreno. Su primer partido como titular es de los que no se olvidan, pero para mal. Encajó tres goles y no tuvo ni una intervención reseñable. Transmitió inseguridad en el juego con los pies.

ALBARRÁN. Impreciso. No se le vio nada cómodo a la hora de sumarse al ataque y fue incapaz de sacar algún centro con precisión al área del San Fernando. Sustituido a la hora de juego ya con el 2-0 en el marcador.

LAPEÑA. Retratado. Otra actuación bastante gris del central riojano, que sale retratado en las jugadas del primer y el tercer gol del San Fernando. Sigue sin transmitir seguridad a la zaga blanquiverde en su pareja con Gudelj.

GUDELJ. Descentrado. Arrancó bien el partido, dando salida al balón desde atrás, pero con todo lo sucedido en la primera parte perdió concentración y su desempeño se vio perjudicado, como dejó patente en la acción que le costó la tarjeta amarilla.

CALDERÓN. Vigilado. El sevillano, que tuvo que lidiar de nuevo con los improperios de la afición del San Fernando, estuvo bien controlado por la zaga del conjunto gaditano y, tras un par de buenas internadas al inicio, apenas tuvo peso en ataque.

ÁLEX SALA. De más a menos. El mediocentro catalán arrancó el partido con personalidad, bien en las acciones de repliegue y moviendo el balón a pocos toques. Tras la expulsión de Kike Márquez su rendimiento bajó.

DIARRA. Abnegado. Mucho trabajo del centrocampista de origen maliense, que no cejó en su empeño de sumarse al ataque cada vez que tuvo la ocasión para ello. En defensa también desplegó su habitual trabajo.

CARRACEDO. Diluido. Arrancó el partido de manera fulgurante con hasta tres acciones de desborde finalizadas con buenos centros al área que sus compañeros no supieron aprovechar. Pero tras la primera media hora su rendimiento cayó en picado.

KIKE MÁRQUEZ. Expulsado. Vio la roja directa en una acción de disputa de balón que Sánchez Villalobos convirtió en lo que no era. Hasta ese momento había sido clave bajando al centro del campo para generar superioridad en favor de su equipo.

SIMO. Error garrafal. El extremo pudo adelantar a su equipo en la primera acción ofensiva de los blanquiverdes pero pifió un remate a bocajarro de manera inexplicable. En ningún momento apareció con peligro tras esa acción.

CASAS. La tuvo. Poco después de que Simo tuviese una ocasión clarísima, el rambleño tuvo la siguiente en un doble remate ante Fuoli que a punto estuvo de acabar en gol. Poco a poco se desdibujó hasta desaparecer del juego y ser sustituido.

ADILSON MENDES. Incisivo. El portugués sigue lejos del nivel esperado pero en San Fernando al menos lo intentó mucho más que en los partidos anteriores. Bien es cierto que todavía no ha tenido los minutos suficientes para ser juzgado.

ISMA RUIZ. Poco peso. El granadino volvió a entrar en un tramo de partido complicado y, como ya le sucedió en Murcia, no tuvo excesiva incidencia en el juego de su equipo. Se espera mucho más de él.

TORIL. Sin tiempo. Le está tocando lidiar con tramos de partido muy escuetos o en los que su equipo está ya bastante fundido. El ariete apenas tocó balón y no tuvo ni siquiera una ocasión para rematar entre los tres palos.

KUKI ZALAZAR. Debut con gol. Minutos complicados los que tuvo que disputar el mediapunta, ya con el duelo decantado totalmente. En el inicio del descuento tuvo una buena acción individual en la que anotó su primer gol con el Córdoba.