El Córdoba CF afronta la prueba de Linarejos con el reto de reafirmarse

Una vez aparcado el mercado de fichajes, es hora de que el césped empiece a dictar sentencia. El Córdoba CF vuelve a la competición después de una semana que se ha hecho más larga de lo normal con el foco puesto en las incorporaciones que el equipo necesitaba y que llegaron casi a última hora. Para muchos, refuerzos insuficientes; para otros, suficientes para seguir en el objetivo. En cualquier caso, los que el club ha decidido acometer. Será el tiempo y los resultados los que terminen por determinar si la estrategia deportiva y económica de la entidad es suficiente para abandonar la Primera Federación y retornar al fútbol profesional, objetivo que ahora hay que perseguir semana a semana a sabiendas de que el calendario va descontando fechas hasta el final y la tarea se complica.

Para muestra, el duelo de este sábado en Linarejos. El Córdoba CF visita a un equipo que lleva prácticamente toda la temporada instalado en la zona baja, con muchos problemas deportivos, un cambio de técnico y una importante revolución en su plantilla durante las últimas semanas. Circunstancias que podrían suponer un motivo para el optimismo de los blanquiverdes, si no fuera porque la visita al Linares ha sido desde hace muchos años como acudir al dentista para el Córdoba.

Los blanquiverdes no ganan un partido en territorio azulillo desde 1988 y no olvidan el golpe recibido el curso pasado en Linarejos, donde el equipo tocó fondo y Germán Crespo perdió el puesto de trabajo después de semanas de caída libre.

Para evitar revivir esos fantasmas, Iván Ania ha tratado de aislar durante toda la semana a sus jugadores del runrún del mercado y enfocar sus miras en el partido. El técnico ha trabajado prácticamente toda la semana a puerta cerrada, escondiendo sus cartas y preparando con celo un duelo que para su equipo es muy importante, por el refrendo que supondría una victoria después de encadenar dos empates de manera consecutiva.

Pero si el reto que supone visitar Linarejos no fuera suficiente de por sí para el Córdoba, los blanquiverdes tendrán que afrontar también el buen momento que atraviesa un Linares que acumula dos semanas sin perder, algo nada sencillo cuando estás instalado en el fondo de la tabla, y que mejora a pasos agigantados en busca de la permanencia.

Para quebrar la historia negra de más de tres décadas en Linares, el Córdoba tendrá que hacer más que nunca un partido práctico, renunciando quizás a ciertos aspectos más estéticos de su juego y sacar a relucir aquellos más primarios como la intensidad, la concentración y el pragmatismo. Linarejos es sinónimo de fútbol de encontronazos, de constantes balones laterales colgados al área y de una batalla en cada acción. En esas facetas tendrá que ser dominador el conjunto cordobesista si quiere llevarse los tres puntos del feudo azulillo.

Las bajas esperadas

Para este encuentro, Iván Ania tendrá que sortear las bajas de Recio e Isma Ruiz en la medular, así como las de Adri Castellano y Carlos García en defensa. El técnico asume con naturalidad esa circunstancia y volverá a tirar del filial, con la más que presumible presencia de Marc Esteban y Santi Prado junto a los habituales Mati Barboza y Álex López, ya recuperado de sus problemas musculares.

Con esos mimbres, y sin opción ya de pensar en hipotéticos refuerzos, al Córdoba CF le llega el momento de apretarse los machos y afrontar cada partido como si fuera el último. Por delante, 17 fechas para confirmar ese puesto de play off y alimentar el objetivo del ascenso. Un reto exigente y estimulante que empieza en Linarejos.