Córdoba CF

El dilema del Córdoba CF en Coria: ¿adaptación o continuidad?

  • Los blanquiverdes visitan este domingo La Isla, un campo muy distinto a El Arcángel que supondrá un desafío a su estilo de juego y podría propiciar cambios

Germán Crespo se dirige a sus futbolistas en un entrenamiento en El Arcángel.

Germán Crespo se dirige a sus futbolistas en un entrenamiento en El Arcángel. / Juan Ayala

El Córdoba CF ha protagonizado un arranque perfecto de temporada en el que suma pleno de puntos y unas grandes sensaciones en el juego. Una dinámica que el próximo domingo encontrará oposición en el Coria, uno de los tres conjuntos que, además de los blanquiverdes, han sumado dos triunfos en las dos primeras jornadas. Será un duelo, por tanto, en el que estará en juego el liderato del Grupo IV de Segunda RFEF, pero que más allá de eso planteará un dilema a Germán Crespo entre la continuidad en su idea de juego o la adaptación al primero de muchos campos en los que quizás haya que buscar un plan alternativo.

Y es que hasta el momento, el Córdoba ha podido exhibir sus mejores virtudes y la ambición con la que afronta los partidos en dos feudos privilegiados como Chapín y El Arcángel. Tanto por dimensiones como por calidad del césped, ambos estadios apenas encuentran parangón en toda la competición, plagada de feudos más modestos, con praderas naturales pero en mucho peor estado, o directamente sintéticas.

En Coria, al Córdoba le espera un campo de césped natural, pero que está lejos de un estado óptimo para la práctica del fútbol que prefiere Germán Crespo, que implica tener el balón y jugar a ras de suelo. El Municipal La Isla es un campo algo más estrecho que El Arcángel, en el que la superficie de juego presenta irregularidades y obliga a explotar otro tipo de fútbol. Sin ir más lejos, el cuadro cacereño ya se estrenó ante su público con una victoria sobre el Antequera (2-0) en la que sus dos goles llegaron en jugadas a balón parado. Ambos llevaron la firma de Patxi Dávila, su lateral izquierdo. Una declaración de intenciones de lo que espera a los blanquiverdes en territorio cauriense.

Y es que el Coria no pasa por tener en su plantilla a jugadores demasiado reconocibles para el gran público. Los extremeños son, eso sí, un bloque sólido que solo ha encajado un gol y que hace del fútbol directo un recurso muy prolífico, especialmente cuando juega en su estadio.

Ese escenario supondrá una prueba de fuego para el Córdoba, que tendrá que adaptarse a una realidad diametralmente opuesta a la vivida el pasado domingo en El Arcángel. Un escenario que será habitual durante el curso, pero que aún no se había presentado. Ante la tesitura, Germán Crespo tiene aún semana por delante para decidir qué estrategia utiliza para intentar sacar los tres puntos de La Isla.

El técnico granadino ha repetido su once inicial en los dos partidos disputados hasta la fecha, pero las especiales características del feudo cauriense podrían deparar algunos cambios. La línea defensiva, con hombres potentes en el juego aéreo como Bernardo Cruz o Visus esperando una oportunidad desde el banquillo, podría ser la primera en sufrir alguna variación. También los jugadores de banda, con especial énfasis en Simo. Y es que el hispano-marroquí, que maravilló en Chapín, no podrá gozar de esos espacios que tan bien sabe explotar en conducción rápida. Omar Perdomo, que ante el Cádiz B ya dejó detalles de ir entrando poco a poco a buen ritmo en el equipo, aparece como una alternativa si el técnico prefiere apostar por un jugador especialista en el golpeo de la pelota parada.

Estilo innegociable, pero con matices

Pero más allá de los nombres, donde sí tendrán que llegar necesarios ajustes es en el estilo que el Córdoba trate de imponer al partido. Germán Crespo ya ha dejado claro que morirá con sus ideas, pero también ha reconocido que habrá feudos en los que tendrá que introducir matices en el fútbol que le pida a sus jugadores.

La Isla parece uno de esos estadios en los que habrá que evitar la excesiva conducción en campo propio o arriesgar menos en la salida de balón. En ese sentido, hombres como José Cruz y Toni Arranz se antojan importantes, debido al gran golpeo de balón en largo que aportan al equipo. Un recurso que puede dar oxígeno por momentos si el rival aprieta en la presión. Desde este miércoles, Crespo y sus futbolistas tienen por delante cuatro sesiones de trabajo para resolver ese dilema entre la continuidad de la fórmula que ha dado réditos la adaptación al drástico cambio de escenario que se presenta en esta tercera jornada.

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