La delegación de Casco Histórico y la Gerencia Municipal de Urbanismo del Ayuntamiento de Córdoba trabajan para poner en marcha las obras de adecentamiento en muchos enclaves de esta zona de la capital cordobesa. Así, hay en la actualidad en marcha dos de ellas, mientras otras seis comenzarán “en breve” para completar las actuaciones de la delegación en materia de obras de este año, si los tiempos administrativos lo permiten. Al tiempo, desde la oposición y distintas asociaciones vecinales han criticado el estado “lamentable” que presentan algunas de las callejas y espacios de la zona y han pedido que se pongan en marcha ya los trabajos del Plan Especial del Casco Histórico (PECH).  

Las obras en la calleja Villa Ceballos han arrancado finalmente tras más de un año de haberlas anunciado, si bien el retraso se debió a asuntos administrativos en Urbanismo, mientras que las de la Puerta del Puente avanzan y deberían estar listas en enero. Las de la plaza de Capuchinos y la Cuesta del Bailío comenzarán “en breve”, según ha informado a el Día la delegada del área, María Luisa Gómez Calero, en un recorrido por la zona.

En el Bailío y Capuchinos se realizarán obras de reforma con un presupuesto de más de 100.000 euros, aunque ya presentan un retraso de más de un año. La actuación permitirá también recuperar la cruz que fue despojada y destrozada de la fuente de la cuesta hace un año.

En el Jardín de los Poetas, las obras de restauración del mural arrancaron, entre críticas de algunas asociaciones de vecinos, la semana pasada. El presupuesto es de unos 3.000 euros y pretende actuar en las humedades del muro y el color de la pintura, deteriorada por el paso del tiempo y el clima.

Las obras del Zoco Municipal comenzarán en noviembre, ha explicado Gómez Calero a este periódico, tras las conversaciones que mantenga la delegación con los artesanos para buscar la mejor manera de organizar los trabajos sin afectar las ventas de esos comercios. De hecho, estaba previsto que arrancaran este mes y la puesta en marcha se ha frenado por el repunte de las visitas y el turismo en Córdoba tras la quinta ola del covid.

Arco de Caballerizas.

Dos actuaciones más de adecentamiento en enclaves del Casco están contempladas también para sacar a licitación y anunciarse “pronto”. Se trata de la mejora de los arcos del convento de San Francisco y el de Caballerizas, donde se trabajará en la restauración de ambos emplazamientos.

En 2018 ya se había reparado el arco de Caballerizas, una zona muy transitada pues separa la Judería de San Basilio, y que por aquel entonces costó 40.000 euros. Sin embargo, parece que el trabajo realizado necesitará una nueva intervención de mantenimiento.

Con un presupuesto de 10.000 euros, se empezará a trabajar en el mural y el retablo ubicado en frente de Bodegas Campos, en la calle Linares, otra de los “contratos pequeños” que la delegación está llevando a cabo para adecentar el Casco Histórico de Córdoba.

Una de las grandes demandas pendientes por los vecinos es la plaza de La Corredera, que ya han denunciado que se encuentra en un estado “de abandono y dejadez”, con pintadas, suciedad y humedad entre sus arcos; el molino de la Albolafia, que se presentó también hace unos años y en el que se está trabajando, ha informado Gómez Calero, o la torre de la Malmuerta. Asimismo, las asociaciones vecinales han pedido respuesta sobre el derrumbe de la muralla romana en la calle San Fernando, que sigue cercado con una valla de seguridad en la acera y cuya restauración, según se informó en su momento, correría a cargo de los dueños del solar, bajo la supervisión de la Junta y la GMU.

Derrumbe de la muralla en la calle San Fernando.

En cuanto a las obras en el Alcázar, que también presentan restrasos, y la Puerta del Puente, en la que ya se está trabajando, la delegada ha querido incidir en que muchas de las obras corresponden a otras concejalías, como Urbanismo o incluso Turismo, con las que también trabajan en coordinación para sacar adelante los proyectos.

Demografía en la zona

Pero el Plan Especial del Casco Histórico va más allá de estas obras, según defiende la delegada, que asegura que se trata de un proyecto que no puede llevarse a cabo en pocos años y en el que uno de los puntos más importantes es frenar el despoblamiento del lugar.

Según reza en el texto del plan, las viviendas desocupadas en el Casco son unas 2.700 (un 19 %), mientras que 10.800 se utilizan como vivienda permanente y unas 700 de forma estacional o secundaria. La cifra duplica la tasa de desocupación que se estima “normal”.

La delegada de Casco Histórico, María Luisa Gómez Calero.

El Plan Especial propone la catalogación de 513 edificios, que “en su mayoría consisten en edificios de viviendas, con numerosos ejemplos de las características Casas-Patio, pero que incluyen asimismo otros tipos, como palacios y casas solariegas, edificios plurifamiliares, casas de vecindad, corrales de vecinos”. El Ayuntamiento asegura que “muchos de los 125 monumentos y de los más de 500 edificios catalogados se encuentran en buen o aceptable estado, y utilizados correctamente. Pero son también muy numerosos los que se encuentran deteriorados, infrautilizados o desocupados, o con usos incoherentes con la caracterización arquitectónica”, admiten.

“Es un trabajo a medio plazo como mínimo porque es muy ambicioso”, defiende Gómez Calero, que asegura que la zona tiene una gran complejidad por ser uno de los cascos más grandes de Europa, “es el doble de Villafranca”, afirma, por lo que “no se puede actuar de manera generalizada”. Para la delegada, es importante que los vecinos también aprovechen las ayudas de Vimcorsa para adecentar sus fachadas y terrenos privados, en los que el Ayuntamiento “no puede actuar”.