Los niveles de contaminación del aire han vuelto a dispararse y, en este ocasión, no ha sido puntual. La ausencia de abundantes precipitaciones y, sobre todo, el intenso tráfico han incrementado los índices de dióxido de nitrógeno y partículas en el aire en Córdoba, hasta el punto de sobrepasar los límites recomendados durante cinco días consecutivos. Así se desprende del informe que realiza diariamente la Consejería de Medio Ambiente, en el que se detecta que los primeros datos negativos se registraron el pasado martes, 21 de noviembre en la estación de la avenida Al-Nasir, en el Vial Norte. En este momento se incrementaron los niveles permitidos tanto de dióxido de nitrógeno como de partículas en el aire. El valor límite horario -durante un ahora- de dióxido de nitrógeno establecido por ley es de 200 microgramos por metro cúbico. El martes, ese nivel se disparó entre las 18:00 y las 19:00, llegando incluso a superar los 300 microgramos. Al día siguiente se llegaron a los mismos niveles y prácticamente a la misma hora. Los niveles de partículas también se superaron desde el 21 al 26 de noviembre, según el informe de la red de calidad del aire. Es cierto que la llegada de la lluvia ha aliviado la situación esta semana.

Otras provincias como Sevilla, Cádiz, Granada o Huelva también sufrieron la semana pasada episodios similares. La peor parte se la llevó la provincia de Jaén, en concreto los municipios de Bailén y Villanueva del Arzobispo, donde se ha superado el límite de partículas durante 12 días consecutivos.

En Córdoba no es la primera vez que se producen este tipo de episodios. En 2015 los niveles permitidos de contaminación por dióxido de nitroso, uno de los elementos más perjudiciales para la salud, se superaron pro primera vez. La legislación establece además que se puede llegar a picos de hasta 200 nanogramos aunque estos niveles no se podrán superar durante más de 18 horas al año. En Córdoba rebasó durante dos horas. Málaga y Sevilla se quedaron justo en el límite. En cuanto al ozono, se ha superado el valor límite en la Asomadilla 54 días, mientras que lo permitido son 25 días y en Lepanto en 16 jornadas. Desde entonces, los episodios parece que se han incrementado, hasta tal punto que Córdoba es la capital de provincia que más tiene que reducir sus emisiones, según los informes que ha realizado al Junta de Andalucía sobre la calidad del aire.

En las grandes aglomeraciones urbanas, como es el caso de Córdoba, el tráfico rodado se sitúa como la principal fuente de emisión de óxidos de nitrógeno y partículas. El sector doméstico, comercial e institucional así como el sector de cementos, cales y yesos cobra también importancia.

El cambio de la situación meteorológica ha permitido un descenso de los niveles, que aunque siguen siendo altos, no rebasan los límites de momento. Es necesario que llueva, y mucho, para que el agua depure la atmósfera y arrastre hacia el suelo los gases y partículas del aire.

El Ayuntamiento ya anunció a primeros de años que va a desarrollar su propio plan contra la contaminación. La mayoría de las medidas, según informó la delegada de Medio Ambiente, Amparo Pernichi, en su momento irán encaminadas en reducir el tráfico en la ciudad, no sacarlo a otro sitio, sino intentar rebajarlo y puso de ejemplo el plan del Ayuntamiento de Madrid, que además cuenta con una ordenanza al respecto.

El 94% de la población española estuvo el pasado año expuesta a unos niveles de contaminación por encima de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), según el último informe anual elaborado por Ecologistas en Acción. En el caso de Andalucía, los contaminantes que más incidencia tienen son el ozono troposférico, las partículas PM10 y MP2,5 y los dióxidos de nitrógeno y azufre. Según este informe, toda la población andaluza respira un aire insano y todo el territorio andaluz está expuesto a niveles de contaminación que dañan la vegetación.