"Yo hubiera preferido no haberlo tenido, pero estaba convencida de que tenía que sobrevivir por mis hijos y por mi misma". Mercedes Osuna es superviviente del cáncer de mama y hoy, cuando se conmemora el Día Mundial, se ha concentrado con medio centenar de personas en el bulevar del Gran Capitán de Córdoba para presentar la campaña Saca Pecho de la Asociación Española Contra el Cáncer (AEEC) en reconocimiento a las personas que han luchado para impulsar la investigación desde los años 70 y lograr que se redujera la mortalidad. 

Mercedes, que es también la vicepresidenta de la asociación en Córdoba, expresa que tenía el convencimiento de que "algún día la enfermedad sería crónica, en unos tiempos donde la supervivencia no era tan alta", se refiere al año 2002, cuando tenía 47 años y fue diagnosticada "cuando era todo más complicado y difícil". 

"Tuve la suerte de tener la fortaleza de afrontar la enfermedad como creo que debería ser, llamándola por su nombre y confiando en los profesionales", asegura Osuna, que invita a todas las personas que han sido diagnosticadas recientemente a creer a en la ciencia y "tratar de pensar que las investigaciones están muy avanzadas, llamar a la enfermedad por su nombre permite aceptar y normalizar, dentro de lo que cabe, que es una enfermedad más y que hay que sacar pecho". 

Y es que, el avance de las investigaciones ha permitido que el Hospital Reina Sofía haya diagnosticado, en lo que va de año, 232 cánceres de mama tras analizar mamografías de mujeres de toda la provincia. Esta cifra supone un incremento del 17% con respecto al año anterior, cuando dentro del Programa de Detección Precoz se descubrieron 198 (el 80% en estadios iniciales).

Mercedes Osuna ahora se encuentra bien, se ha pintado hoy las manos de rosa para reivindicar la lucha contra el cáncer de mama y ha repartido folletos junto a un gran grupo de mujeres en Córdoba para recoger fondos y continuar con la investigación en la materia y la atención a las pacientes de la provincia. "Sigo con mi actividad profesional y con una calidad de vida estupenda", asegura, pero no todas las mujeres corren con la misma suerte. Según los datos presentados este martes, 19 de octubre, por la presidenta de la Asociación Española Contra el Cáncer (AEEC) en Córdoba, María Auxiliadora Cabanás, el 15% de las mujeres que padecen la enfermedad están en extrema vulnerabilidad.

Así, según los últimos datos de la asociación, el 34% pierde el trabajo y casi el 70% pierde el salario o los ingresos que tenían, muchas de ellas siendo el sustento de familias enteras, mientras que el 36% ha perdido más de 11 meses de trabajo. Según un estudio realizado por la asociación, la media de gastos directos junto a la pérdida de ingresos es de alrededor de 41.820 euros, de estos, más de 9.000 son gastos directos de farmacia y tratamientos y más de 33.000 se traducen en la pérdida de ingresos que sufre cada mujer que padece un cáncer de mamas.

Nuevos diagnósticos e investigación 

El numero de diagnósticos de cáncer ha sido superior, también en Córdoba y en estadios precoces. Según ha explicado Cabanás, la investigación ha permitido que nódulos que "son prácticamente no palpables aparecen en los cribados", con lo que anima a las mujeres a pasar por su consulta a tiempo. Por su parte, ha puesto en valor que ahora los resultados de las mamografías se recibirán forma inmediata tras el informe del radiólogo mediante un mensaje de texto (SMS) gracias a un sistema pionero puesto en marcha en el Distrito Córdoba y Guadalquivir.

En España se han alcanzado los 33.000 nuevos diagnósticos este año y es el segundo cáncer, después de colon rectal, con más incidencia. En 2021 se han atendido a un total de 23.076 personas en la asociación. Pero las cifras que han aumentado "con mucha diferencia" son las relacionadas a citas con trabajadoras sociales, precisamente por la pérdida de economía que supone la enfermedad. 

"No hay nada más bonito que una mujer luchando por la vida", ha expresado la presidenta de AEEC durante el acto, "pero deja secuelas de tipo físicas, psicológicas y económicas en mujeres que agravan su vulnerabilidad con una inequidad social que no se asemeja al resto". 

El cáncer "significa un doble estigma para las mujeres", ha asegurado Cabanás porque "casi siempre se vincula a mujeres y a las mamas, por la educación que tenemos, como un signo de identidad, porque el cartel de presentación de las mujeres es el cuerpo". 

La figura de las mujeres siempre está ligada al aspecto físico, al cuerpo, pero "las mujeres somos mucho más que nuestro físico y hay que llegar a donde hay que llegar, somos únicas con o sin mamas", ha expresado también Mercedes Osuna.