La mayoría de los cordobeses tendrá en 2025 entre 45 y 72 años

La estructura de la población tiende a un envejecimiento acelerado. Así queda detallado en el anuario de 2011 presentado ayer por el Instituto Andaluz de Estadística en el que se refleja cómo afectará en poco tiempo el descenso de la natalidad y la mayor esperanza de vida de los cordobeses. De modo que si en estos momentos la mayor curvatura de la pirámide poblacional está anclada entre los 18 y los 44 años en tan sólo 15 años se desplazará hasta los 45 y los 72 años.

Este cambio de tendencia en la población ya lo han vaticinado diversas estadísticas, debido sobre todo a los cambios de hábitos de los españoles a partir de la década de los 90. Las mujeres se incorporaban de forma masiva al mercado laboral, anteponiedo su proyección profesional a ser madre de familia. Las principales consecuencias de este fenómeno se han visto reflejadas en las cifras de natalidad, que han caído en picado año tras años. Pero, ha sido a partir de 2008, año de comienzo de la crisis económica, cuando se han registrado los datos más pesimistas. En 2009 cada mujer tenía 1,51 vástagos de media, cifra que se ha visto reducida durante el primer semestre de 2011 hasta los 1,42. Un dato que sitúa a Córdoba a la cola dentro de la comunidad autónoma, ya que tan sólo Jaén registra un dato inferior con 1,41 niños por madre.

Las previsiones del Instituto de Estadística de Andalucía señalan que este dato tenderá a bajar aún más en los próximos 15 años. Así, los niños de entre cero y 10 años que en la actualidad representan un 11,8% de la población, en 2015 caerá hasta un 10,3%.

El mayor grueso de la población lo representarán los cordobeses con una edad comprendida entre los 44 y los 74 años. Así si en estos momentos el mayor pico se encuentra en los 35 años, en 2025 estará en los 49 años.

La mayor esperanza de vida de los cordobeses también juega un papel muy importante en la futura pirámide de la población. Los cordobeses, junto con los de Jaén, son los varones andaluces con más posibilidades de longevidad (77 años), mientras las mujeres cordobesas están las primeras, con 83,5 años, seguidas de las jiennenses (83,3 años). En este aumento de la esperanza de vida los avances sanitarios experimentados en los últimos años son la pieza fundamental.