Inma Borrego presenta en Córdoba su libro 'Lo que tu mente calla, tu intestino lo grita'

Divulgación

La sanitaria, especialista en salud digestiva y microbiota humana, explica cómo el estrés o el estilo de vida influyen en el aparato digestivo

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Inma Borrego, con su libro, rodeada de amigos en la presentación.
Inma Borrego, con su libro, rodeada de amigos en la presentación. / El Día

La sanitaria y divulgadora andaluza Inma Borrego, especialista en salud digestiva y microbiota humana, ha presentado en la Oleoteca de Córdoba su libro Lo que tu mente calla, tu intestino lo grita (Zenith, Grupo Planeta), una obra en la que invita a descubrir la conexión entre el cerebro y el sistema digestivo, y da las claves para su gestión y mejorar así la salud física y emocional.

Más que una presentación, la cita fue una charla de conciencia y educación en salud digestiva. Inma Borrego habló, con un lenguaje claro y cercano, sobre cómo el estrés, el estilo de vida y las emociones no expresadas influyen directamente en el intestino. Además, explicó el papel del sistema nervioso entérico -el llamado “segundo cerebro”- y del eje intestino-cerebro, y cómo las tensiones sostenidas o los ritmos de vida acelerados pueden traducirse en síntomas físicos concretos: digestiones lentas, inflamación, cansancio o alteraciones intestinales.

Bajo el lema de su libro, Lo que tu mente calla, tu intestino lo grita, la autora desmontó la idea de que “son solo nervios”, recordando que lo que no se expresa emocionalmente, el cuerpo lo acaba manifestando, y el intestino suele ser uno de los primeros en hacerlo.

En la parte final, Inma Borrego habló sobre el aceite de oliva virgen extra (AOVE) como alimento funcional, destacando su papel antiinflamatorio, su impacto positivo en la microbiota intestinal y su ayuda en la motilidad digestiva.

Portada del libro.
Portada del libro. / El Día

El encuentro terminó con una cata guiada donde las personas que asistieron pudieron experimentar la diferencia entre un aceite de oliva virgen extra y otro de menor calidad, y entender cómo esa diferencia se percibe no solo en el sabor, sino también en lo que aporta a nuestra salud digestiva.

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