Dos glorietas y un gran viaducto unirán la carretera de Palma y la del Aeropuerto

El Ministerio de Fomento cuenta ya con un proyecto sobre la mesa para la construcción del tramo norte de la Variante Oeste, un viario que unirá las carreteras del Aeropuerto (N-437) y de Palma del Río (A-431) y que, entre otros objetivos, pretende reducir la circulación de vehículos pesados por la ciudad. Según este documento, al que ha tenido acceso El Día, este tramo de la Variante Oeste se localizará a poco más de un kilometro de la recién inaugurada Ronda de Poniente y contará con dos grandes glorietas para canalizar el tráfico que llegue desde las carreteras del Aeropuerto y Palma del Río. La primera rotonda, que enlazará con el tramo sur de la Variante, estará ubicada a la altura del viario que conduce a la subestación de Casillas, y la segunda entre los terrenos del Parque Joyero y las naves industriales que el empresario Rafael Gómez levantó sobre el solar de la antigua fábrica Colecor.

Al margen de estas dos grandes glorietas, otro de los ejes que vertebrarán el tramo norte de la Variante Oeste será la construcción de un enorme paso elevado para sortear las vías de ferrocarril que se encuentran en las inmediaciones de la barriada periférica de El Higuerón. El viaducto, según los planos que se incluyen en el proyecto elaborado por la empresa Ayesa para Fomento, contará con una longitud de algo más de 700 metros y arrancará poco antes de la glorieta de la carretera de Palma del Río. No será, sin embargo, el único paso que estará a un nivel diferente al de la carretera principal de la Variante. El proyecto de Ayesa señala otros cuatro. Uno estará junto a la rotonda de enlace a la carretera del Aeropuerto, otro se ubicará sobre las vías de ferrocarril Córdoba-Málaga, el tercero a la altura del ramal que conduce al Parque Joyero y el último será un paso inferior a la glorieta de la carretera de Palma del Río.

El documento del Ministerio de Fomento alude también al presupuesto y a los plazos de ejecución de este tramo de la Variante Oeste. Así, según consta en el proyecto, la obra requerirá una inversión de algo más de 28 millones de euros. En este importe se incluye desde el presupuesto base de licitación hasta el capítulo de expropiaciones, las tasas destinadas a la conservación del patrimonio español y el programa de vigilancia ambiental, si bien la obra propiamente dicha es la que absorbe la mayor cantidad de dinero con un desembolso de 27,3 millones de euros. En lo referente al periodo estimado para la ejecución de esta intervención, el trabajo realizado por la sociedad Ayesa habla de 16 meses, un periodo relativamente corto si se tiene en cuenta la dimensión del proyecto.

Para la construcción del tramo norte de la variante, como es lógico, también serán necesarias algunas expropiaciones, un trámite que se resolverá por la vía rápida al tratarse de una infraestructura de interés público. La ocupación, por tanto, será inmediata y no se verá trabada por procedimientos judiciales. En total, Fomento tendrá que expropiar una superficie de 134.876 metros cuadrados -lo equivalente a algo más de 13 campos de fútbol- y para ello tendrá que abonar a los propietarios de estas fincas en torno a medio millón de euros (496.219). Estos terrenos, de naturaleza rústica, no cuentan con ninguna casa construida, según refleja el documento de Fomento.

Al margen de los datos técnicos y económicos que destaca el proyecto, la Variante Oeste está llamada a convertirse en una de las principales vías de comunicación de la ciudad, ya que sus tramos sur y norte servirán para conectar la autovía A-4 (Cádiz-Madrid) y las carreteras del Aeropuerto y de Palma del Río, dos viarios que se encuentran actualmente algo aislados de las principales conexiones de la ciudad. En este sentido, hay que destacar que, aparte de descongestionar a la ciudad de la circulación del tráfico de vehículos pesados, mejorará las comunicaciones a recintos como el Parque Joyero, el Centro Intermodal de Transportes, el aeropuerto y el futuro parque industrial de la carretera de Palma del Río. En este polígono industrial, en concreto, ya está prevista la llegada de algunas empresas, como Decathlon y Bricodepot, así como los pequeños y medianos joyeros del futuro parque de San Eloy.