Turismo

Córdoba, bien situada para la recuperación turística por su escasa dependencia del visitante extranjero

  • Un estudio de Adeitur insiste en la promoción dirigida a aumentar unas pernoctaciones que están a la cola en Andalucía

Turistas en el puente Romano.

Turistas en el puente Romano. / Juan Ayala

¿Qué va a pasar con el turismo? ¿Cómo saldrá el sector de la crisis del coronavirus? ¿Volverá Córdoba a tener el potencial que se ha perdido por el camino una vez pasado el chaparrón? Está claro que el turismo es uno de los sectores más perjudicados por la pandemia del covid-19 y cómo será su recuperación es todo una incógnita.

Pues bien, un estudio de la Consultoría Turística y de Empresa Adeitur vincula muy estrechamente el ritmo de la recuperación del destino Córdoba y del resto de los destinos andaluces al factor de la estacionalidad, combinado con la dependencia que se tenga de los mercados extranjeros.

El sector tiene ahora en sus manos la labor de darle la vuelta a la situación y buscar soluciones que puedan aplicarse lo antes posible para intentar, en la medida de lo posible recuperar, las pérdidas.

El estudio, elaborado por Antonio Ramos y María Serrano, insiste en que Córdoba no es de las provincias andaluzas que tenga una estacionalidad excesivamente pronunciada, tan sólo levemente en primavera y por el papel que juega la capital.

Ese hecho se puede comprobar en la distribución de la demanda hotelera por estaciones correspondiente al año 2019, donde el destino Córdoba es en invierno el tercero más demandado tras Sevilla y Granada; en primavera es el segundo destino más demandado tras Huelva; en verano es el último destino andaluz en demanda hotelera; y en otoño es el tercero tras Jaén y Sevilla.

Esa distribución de la demanda hotelera es en Córdoba del 21% en invierno, del 29,4% en primavera; del 25,5% en verano y del 24,2% en otoño, porcentajes algo similares a lo largo del año, algo muy distinto a lo que ocurre en otras provincias. En el caso de la capital, Córdoba recibe mucho turismo extranjero que solo llega de visita, lo que es un hándicap a la hora de la estacionalidad.

Así, el informe detalla que, en Andalucía, la provincia que sufre la estacionalización más aguda es  Almería, con el 51% de pernoctaciones en los tres meses de verano. Este dato está claramente vinculado con la circunstancia de que es la provincia que recibe menos turismo extranjero. En segundo y tercer lugar se encuentra Huelva y Cádiz, con picos en verano que llegan al 47,69% y 44,49% respectivamente. El cuarto lugar lo ocupa Málaga. De esta forma, las provincias costeras sufren una estacionalidad más pronunciada que las provincias de interior, exceptuando Granada.

El estudio de Adeitur incide en que las provincias cuyo potencial e identidad turística pivota principalmente en la oferta para el turismo cultural, como Córdoba, Sevilla y Granada, son las que menos sufren el fenómeno de la estacionalidad turística, siendo muy similar la afluencia de turistas en primavera, verano y otoño.

De estas tres provincias, la que tiene mayor dependencia del turista extranjero es Sevilla. "Esta circunstancia podría ralentizar su recuperación de la crisis provocada por el covid-19, debido a la tendencia de reducción de turismo internacional", incide en informe.

Respecto a las pernoctaciones provocadas por turistas extranjeros en estas tres provincias, destaca Sevilla con un 60,62%, frente a un 46% de Granada, ocupando Córdoba el último lugar, con un 39,28% de pernoctaciones de turistas extranjeros.

"Al margen de que, tras el covid-19, los destinos con mayor dependencia de extranjeros vean más ralentizada su recuperación, seguro que dará fruto la apuesta por una importante promoción en los mercados emisores consolidados, así como continuar indagando las potencialidades de nuevos mercados y países lejanos. El turista extranjero es una fuerza muy importante para el destino España y para el destino Andalucía, contribuyendo a paliar las oscilaciones de la demanda. Por tanto, trabajar la captación o fidelización de estos destinos internacionales continúa siendo una prioridad. Todo ello sin descuidar al turista nacional", puntualiza el informe de Adeitur.

En cuanto a la estacionalidad propia de Córdoba y apoyándose en el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el estudio se insiste en que el número de turistas  que pernoctaron en alojamientos reglados en Córdoba durante la primavera (sumando capital y provincia) representaron tan solo un 4,89% más respecto al verano y menos de un 6% respecto al otoño. 

"Este dato supone  que Córdoba acoge en  primavera unos 66.000 turistas más que en los meses estivales", detalla.  Estos porcentajes, respecto al 1,35 millones de turistas visitaron y pernoctaron en la provincia al año, es de una importancia relativa en términos de estacionalidad. "Máxime si tenemos en cuenta que en primavera tenemos dos hitos turístico-culturales de primer orden: La Semana Santa y la Fiesta de los Patios", insiste el estudio.

Un dato que resalta el informe  es que, en el año 2019, la demanda que se alojó en establecimientos hoteleros en Córdoba, durante el mes de mayo fue tan solo un 3% más que la que lo hizo en el mes de agosto, (unos 33 mil turistas más). "Esta variación no denota una estacionalización preocupante, respecto del total de 1,2 millones de turistas de todo el año", sentencia el informe.

Asimismo sostiene que si se habla de pernoctaciones, durante el verano de 2019 hubo 57.418 pernoctaciones menos que en primavera de 2019, pasando de casi 695.000 en primavera a unos 638.000 mil en verano. "El índice de pernoctación en los hoteles  es ligeramente mayor en verano, (1,88 noches por turista) que en primavera (1,71 noches por turista)", puntualiza el estudio.  

Y añade que un aspecto que define el destino Córdoba en primavera es la fuerte atracción de la capital, produciendo un notable incremento en estos meses del número de excursionistas -o aquellos turistas que no pernoctan. "Este colectivo limita el gasto en nuestro destino al prescindir del alojamiento", recalca el informe.

El documento incide en que la promoción dirigida a los excursionistas es de gran interés para promover un turismo sostenible. "Se trata de una promoción dirigida a despertar el interés por conocer otros recursos y atractivos de Córdoba y su provincia, que no son tan icónicos, pero que aportan un enorme valor y autenticidad a la experiencia turística. Este incremento provocado por los excursionistas se evidencia por el incremento de demanda que se produce en Córdoba, en fines de semana y puentes", apunta.

"Es ya una necesidad acuciante, para dimensionar la importancia del turismo en Córdoba y para la toma de decisiones, públicas y privadas, que se disponga de una observatorio turístico que mida y aporte datos de la demanda: procedencia, perfil, hábitos de viaje y consumo, motivaciones... Es preciso conocer en profundidad quienes y por qué eligen Córdoba. En este sentido, el nuevo Centro de Análisis y Prospectiva del Turismo de Córdoba (CAPT) de la UCO, aportará información relevante a tener en cuenta en la planificación turística del destino", concluye el informe de Adeitur.

 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios