Un detenido fallece en un calabozo de la Comisaría de Campo Madre de Dios
La investigación apunta a que el joven, de 25 años, murió por causas naturales


Un hombre detenido tras una pelea falleció ayer en dependencias de la Comisaría de Campo Madre de Dios. Así lo informaron fuentes de la Policía Nacional a el Día, que confirmaron que el fallecido había sido detenido el pasado sábado a primera hora de la noche tras haber discutido con su cuñado y su tío a los que, supuestamente, habría agredido con un cuchillo. A falta de confirmación por parte del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), todo apunta a que el joven, de 25 años, habría muerto por causas naturales y en ningún caso por el daño que pudiera haberle ocasionado la reyerta por la que fue apresado. Fuentes cercanas a la investigación aseguraron además que el joven presentaba contusiones derivadas de la pelea pero que éstas no habrían sido el desencadenante de la muerte; aunque el resultado oficial de la autopsia, al cierre de esta edición, aún no había sido publicado.
Desde la Policía Nacional explicaron que el suceso tuvo lugar el sábado 11 de junio y que los agentes llevaron al procesado al Hospital Universitario Reina Sofía, un protocolo que viene marcado y al que tienen derecho todos los acusados que se vean envueltos en algún tipo de pelea. En un primer momento, los sanitarios que atendieron al joven no observaron lesiones que revistieran gravedad por lo que éste fue trasladado a la Comisaría Campo Madre de Dios en calidad de acusado por un delito de lesiones. Cabe apuntar que las otras persona que participaron en el conflicto no fueron detenidas en ningún momento y que, según explicó la Policía, si se hubiera observado que el detenido sufría daños más graves también habrían sido detenidos y trasladados a la Comisaría.
Ya en dependencias policiales y transcurrido un tiempo, el detenido avisó a los agentes y les comentó que no se encontraba bien, por lo que fue trasladado de nuevo al complejo hospitalario cordobés. Allí se le recetó una medicación que los agentes suministraron cuando estuvieron de vuelta en la Comisaría. De nuevo el supuesto agresor comentó a los guardias que se volvía a encontrar mal y se llamó a una ambulancia del 061, pero finalmente falleció en la misma Comisaría.
Las mismas fuentes policiales detallaron que el protocolo a seguir en estos casos pretende proteger la seguridad del detenido y el trabajo de los funcionarios que se vean implicados en el proceso. Por ello, los agentes se ven obligados a ofrecer la opción de traslado al hospital para comprobar el estado de aquellas personas que resultan heridas en una pelea y que son puestas en manos de la autoridad judicial, incluso aunque los detenidos en este caso se nieguen.
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