Tras la vorágine de las fiestas navideñas, y esa inquietud por la vuelta de las grandes reuniones de familiares y/o amigos que provocó una subida en la venta de test en las farmacias -nada que ver con la fiebre vivida un año antes-, la pandemia del Covid ha vuelto a estabilizarse en Córdoba. Y no solo en cuanto a las cifras de las variantes de transmisión, sino también en cuanto a la presión asistencial, que pasa por ser más importante en esta fase de control de una enfermedad que, eso sí, sigue acumulando muertes, aunque no sean consecuencia directa del coronavirus en la mayoría de los casos.

El último balance ofrecido este martes por la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía anota para la provincia de Córdoba su mejor balance de contagios en más de cuatro meses y, además, refleja que en los hospitales apenas hay una docena de personas ingresadas con Covid, ninguna de ellas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Datos para pensar en la nula influencia -al menos por ahora- de esos nuevos linajes aparecidos semanas atrás y en vislumbrar un futuro aún más de normalidad, algo a lo que puede ayudar la retirada, parece que pronta, de la obligatoriedad de usar mascarillas en el transporte público.

De momento, en la última semana Córdoba ha anotado solo 63 positivos. Es la cifra más baja desde que el 13 de septiembre se contabilizaran 58, si bien entonces los balances se realizaban dos veces por semana y ahora ya es únicamente una. Con esta última actualización son ya 169.771 cordobeses los que han resultado infectados por el virus SARS-CoV-2 desde que en marzo de 2020, va ya para tres años, irrumpiera la crisis sanitaria para poner patas arriba el mundo, de punta a punta.

Además, el parte de Salud recoge cinco nuevas muertes que, como recordaba en una entrevista con El Día el director del plan de vacunación contra el Covid en Andalucía, David Moreno, ahora son "más con Covid que por Covid, aunque una parte sí es por el virus". En total, la pandemia se ha cobrado ya 1.664 vidas en la provincia.

El dato que mejor contrasta es el de las altas médicas, que crece en 71 más en la última semana para dejar el total en 165.647. Hay que advertir, eso sí, que no todos los pacientes oficialmente curados han olvidado por completo la enfermedad, pues muchos de ellos mantienen secuelas. Con estos tres datos -contagios, fallecimientos y altas-, los casos activos de Covid actualmente en Córdoba ascienden a 2.460.

De ellos, una mínima parte tiene que pasar por el hospital. De hecho, en los siete días más recientes se han registrado hasta 18 ingresos, dos de ellos con necesidad de pasar al área de críticos por su delicado estado de salud. Sin embargo, eso no redunda en una mayor presión asistencial, que pasa por mínimos: solo hay 12 personas hospitalizadas, ninguna de ellas en la UCI.

Esto sitúa a Córdoba como la provincia con menor presión asistencial de Andalucía. En Málaga hay hasta 45 pacientes ingresados, tres de ellos en críticos; le siguen Sevilla (38 y cinco), Cádiz (34 y dos), Granada (32 y dos), Huelva (23 y cero), Jaén (19 y una), y Almería (16 y dos).

Por último, la campaña de inmunización sigue su curso, ahora con la dosis de recuerdo de otoño a un ritmo mucho más ralentizado, algo normal visto el alto grado de cobertura, por encima del 90%, que hay ya en la provincia. En estos algo más de dos años de plan de vacunación, en Córdoba se han administrado 1.976.860 dosis de la vacuna, que han repercutido en que 704.659 personas tienen la pauta de primovacunación completa; además, 716.976 han recibido al menos una dosis y 161.120 se han pinchado la de recuerdo.