Hoy mismo comienzan las actividades preliminares a la celebración de la fiesta del carnaval, pero no lo hacen con muy buen pie. La fiesta vuelve a abrir otro frente de conflicto para el Gobierno local después de que los carnavaleros hayan decidido manifestarse mañana para denunciar el "trato injusto" que según ellos, reciben por parte del PP. Justo ayer se llevó a cabo la presentación de actividades que el Ayuntamiento llevará a cabo dentro de la fiesta y la concejal delegada de Fiestas y Tradiciones Populares, Amelia Caracuel, se vio las caras con el presidente de la Asociación Carnavalesca Cordobesa, Antonio Navajas. Lo que en un principio parecía ser una rueda de prensa en la que informar sobre los eventos carnavaleros se tornó a la postre en un cruce de acusaciones entre Caracuel y Navajas, que lejos de solucionar el conflicto, pareció enredarlo más.

La primera de las quejas que manifestó Navajas fue el retraso de los pagos que tiene el Consistorio con la asociación que preside. Según comentó durante la rueda de prensa, "nosotros tenemos que presentar unos papeles para justificar los pagos y lo hacemos antes de mayo, en ese mimo mes sale que tenemos una deuda con Hacienda de 1.100 euros a raíz de un pago retrasado del IRPF. En septiembre solicitamos un aplazamiento del pago de la deuda y se nos concede y en ese mes el Ayuntamiento aprueba su pago. Hasta hace dos semanas no se nos hace ese ingreso y tan solo se hace una parte del mismo, en torno a un 30%". Más adelante, prosiguió Navajas, el total de la deuda no se había cobrado y "nos dijeron desde el Ayuntamiento que no se nos había pagado por ese embargo de Hacienda, haciendo que éste ascendiera hasta 1.400 euros por los intereses del aplazamiento". Tras todo esto, la deuda de la asociación se ingresó el jueves pero aún están a expensas de recibir el montante que queda del convenio con el Consistorio.

Como respuesta, Amelia Caracuel explicó que "el pagar o no pagar en una fecha u otra no es un tema caprichoso del Ayuntamiento ya que existía un embargo a la asociación y los trámites administrativos hay que cumplirlos". La concejal de Festejos afirmó que una vez se hubo levantado el embargo ellos dieron la orden de pago, "el resto son temas técnicos y yo no soy técnica, yo soy política". A esto añadió que hay que "aprender para años venideros y tenemos que correr más en los trámites para que no se llegue a dar la situación de que un día o días antes de empezar los actos nos encontremos con esta situación". Estas fueron las palabras que desataron la polémica ya que Navajas no dudó en contestar a la concejal y afirmar que "es curioso que siempre se hacen esfuerzos y siempre se solucionan las cosas pocos días antes de que empiecen las actividades y que se hece cuando nosotros nos plantamos y decimos que no vamos a salir". El presidente del colectivo carnavalero afirmó que todos los esfuerzos que se llevan a cabo pocos días antes "también se pueden hacer unos meses atrás".

Caracuel no quiso participar en el cruce de palabras porque, según comentó, eso "dañaría al mismo carnaval". Pero no tardó en afirmar que el problema con el que se encuentra ahora la asociación no es cosa del PP ni de los tres años que llevan al frente del Ayuntamiento, sino algo de antes. Ante esto, Navajas explicó que "en ningún momento hemos centrado esto en contra de lo que se hace ahora porque efectivamente los problemas vienen de siempre", a pesar de que en el anuncio de la manifestación de mañana se hace referencia a que el trato "injusto" que reciben los carnavaleros viene del PP.

Asimismo, el presidente de la asociación no sólo denunció los impagos del convenio por parte del Ayuntamiento. Navajas acusó al Gobierno municipal de "poner trabas" a su trabajo poniendo como ejemplo que se les prohiba celebrar el Domingo de Piñata -el que cierra la fiesta- "porque a alguien le parece mal ya que entra dentro de la Cuaresma, cuando el resto de Andalucía lo celebra". También comentó la reducción de la subvención mientras que se doblan las agrupaciones. Caracuel respondió que las fechas se establecieron en una reunión con la asociación, "por lo que no están impuestas, y lo propuse para que no se solaparan las fiestas".