Las bodas civiles se duplican en 10 años y suponen ya el 23% del total

Vestirse de blanco y decir el "sí quiero" ante el altar ya no es tan importante para los cordobeses en el momento de casarse. Y es que las bodas civiles se han duplicado en la última década, al pasar de los 484 matrimonios de este tipo contabilizados en 1996 a los 941 registrados a lo largo del año 2006. Las colas que cada año se forman en el Ayuntamiento para conseguir una fecha para casarse en el Alcázar no son sólo una anécdota, sino un fiel reflejo de los cambios de hábitos de la sociedad, que cada vez más prefieren una celebración civil en vez de llegar al altar.

Este aumento de los matrimonios civiles se complementa con un progresivo descenso de los enlaces religiosos, que en el último lustro han caído más de un 15 por ciento. A pesar de todo, la opción de casarse por la iglesia sigue siendo la principal, ya que del total de 4.042 enlace celebrados en 2006, 3.092 fueron por el rito católico, nueve según otra religión y 941 fueron civiles. Es decir, que la Iglesia acaparó el 76 por ciento de los matrimonios, aunque un año antes, este porcentaje superaba el 80 por ciento. Menos significativa es la evolución de las uniones que se celebran por algún rito religioso distinto al católico, cuyo número se ha mantenido constante desde 1996: entre cinco y diez anuales. La elección de darse el "sí quiero" en una ceremonia civil es ya toda una tradición en otras regiones de España como Cataluña o las Islas Baleares, donde los enlaces laicos superan con holgura en número a los eclesiásticos. En cualquier caso, la nupcialidad en Córdoba está fuertemente marcada por el rito católico y, en comparación con la media andaluza, Córdoba es una de las provincias donde las bodas religiosas alcanzan una mayor tasa. El aumento de las bodas civiles podría estar relacionado con la secularización de la sociedad y la proliferación de separaciones y segundas nupcias. No en balde, España es uno de los tres países de la Unión Europea donde más ha aumentado el número de divorcios en la última década (un 59 por ciento), sólo superado por Portugal e Italia. La ley del divorcio exprés, que entró en vigor el 1 de julio de 2006, ha dado un vuelco a la vida en pareja. Ya no tienen cabida las segundas oportunidades porque, las facilidades que aporta la nueva normativa impulsada por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero han influido sobre todo en los divorcios, que prácticamente se han duplicado en el último año. Los matrimonios entre personas del mismo sexo también han sufrido un aumento vertiginoso, pues se han multiplicado por cuatro en sólo un año. La entrada en vigor de la ley que permitía los enlaces entre homosexuales, que se aplica desde julio de 2005, permitió ese año un total de ocho enlaces, cuatro entre hombres y otros tantos entre mujeres. En 2006, sin embargo, las bodas entre parejas del mismo sexo llegaron hasta 36 -23 masculinas y 13 femeninas-, lo que demuestra que la normativa que proyectó el PSOE ha calado en la sociedad cordobesa. No obstante, Málaga fue la provincia andaluza donde más matrimonios de este tipo pues se registraron en 2006, un total de 220, seguida de Sevilla, con 176.