Antonio Díaz ha sido reelegido presidente de la Confederación de Empresarios de Córdoba (CECO) en una asamblea general extraordinaria celebrada para tal efecto y en la que ha accedido a su segundo mandato por aclamación popular sin que se haya presentado ningún otro candidato.

Díaz es presidente de CECO desde enero de 2016 y ahora afronta un segundo mandato en el que todo pivotará alrededor de la crisis sanitaria y económica generada por el covid-19. Hay que tener en cuenta además que también presidente la Cámara de Comercio de Córdoba, por lo que ostenta dos altos cargos en dos de las instituciones económicas más importantes de la provincia.

Antes de ser elegido, y acompañado por el presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), Gerardo Cuerva, el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara y el presidente del Consejo Andaluz de Cámaras de Comercio, Javier Sánchez, Díaz ha afirmado afrontar "con la misma ilusión de siempre" este nombramiento.

"Defender a las empresas es una cuestión de principios", ha declarado el presidente de CECO, que ha apuntado que "soy una persona que cree en lo que hace y que disfruta con su trabajo". Todo su trabajo a partir de ahora girará, según ha explicado, en el plan de acción desarrollado durante estos cuatro años anteriores. Se trata, ha añadido, de una "hoja de ruta" que "tiene que poner a la nueva CECO en el lugar que le corresponde".

Con respecto a las perspectivas económicas de la provincia en plena pandemia, Díaz ha dicho que dependerán de la evolución de la misma y ha evidenciado que todo dependerá de "cómo se comporte el otoño". Las previsiones, ha manifestado, son las mismas para Córdoba que para el resto de Andalucía o del país y ha afirmado que "el empresario muchas veces no trabaja porque no lo dejan".

Sí ha reconocido que hay sectores mucho más perjudicados que otros a causa de esta crisis, como la hostelería, el turismo, el comercio o el transporte de mercancía y viajeros. Aunque la crisis, ha añadido, "llega a todos los rincones, desgraciadamente".

En cuanto a la evolución de la Confederación durante estos primeros cuatro años de mandato, Díaz ha recordado que se incorporó en enero de 2016 y que se venía arrastrando la crisis económica de 2008. Con ello, ha insistido en la necesidad de trabajar en ese plan de acción que ya está desarrollado porque ahí están "todas las medidas que vamos a adoptar en los próximos años".

Entre sus objetivos, el presidente de CECO se marca crecer en facturación, afiliados y prestación de servicios, por lo que espera contar con una organización "más representativa y más potente". Además, ha reconocido que el comité ejecutivo de la Confederación "merece una vuelta", por lo que se avecinan cambios, aunque estos llegarán, ha finalizado, "en su momento".