Un hombre que ha sido condenado en siete ocasiones por vender por droga a más de 15 años de prisión se enfrenta ahora a una nueva petición de pena de otros siete años por un nuevo delito contra la salud pública al haber sido sorprendido en su domicilio por la Policía con sustancias estupefacientes.

El Ministerio Fiscal, en las conclusiones provisionales, le aplica al acusado, un hombre de 60 años, la agravante de reincidencia, en su modalidad de multirreincidencia, por el que solicita la pena superior del delito contra la salud pública.

Según la acusación pública, el acusado se dedicaba en su domicilio al “comercio ilícito de sustancias estupefacientes y piscotrópicas de diverso tipo, ocupación ésta que constituye su principal medio de vida”.

Según la acusación pública, el acusado se dedicaba en su domicilio al “comercio ilícito de sustancias estupefacientes y piscotrópicas de diverso tipo, ocupación ésta que constituye su principal medio de vida”. El 26 de febrero pasado, la Policía Nacional accedió a su domicilio e intervino 10,74 gramos de cocaína, 657 de marihuana, 1,3 kilos de hachís y 17 cajas de Traxilium, además de 1.227 euros en efectivo y un revolver detonador en mal estado de conservación pero en condiciones de ser disparado.

Por el delito contra la salud pública, que es por el que se aplica la multirreincidencia, el fiscal pide una condena de siete años y seis meses de prisión y multa de 39.000 euros, con la responsabilidad subsidiaria de otro año de cárcel en caso de impago, además de la accesoria de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena.

Asimismo, le imputa otro delito, el de tenencia de armas prohibidas, por el que solicita una pena de dos años de cárcel.

El acusado fue condenado por primera vez por la Audiencia Provincial de Córdoba el 25 de febrero de 1998 y, además de este jurisdicción y en el Juzgado de lo Penal, también lo ha sido en Algeciras en tres ocasiones a penas que van desde los diez meses a los cuatro años de prisión.

El 26 de febrero pasado, la Policía Nacional accedió a su domicilio e intervino 10,74 gramos de cocaína, 657 de marihuana, 1,3 kilos de hachís y 17 cajas de Traxilium, además de 1.227 euros en efectivo y un revolver detonador en mal estado de conservación pero en condiciones de ser disparado.