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El pasado 21 de mayo Cajasur comenzó el camino que culmina hoy en su desaparición como caja de ahorros para convertirse en un banco dependiente de la BBK. La senda hasta llegar a esta situación ha sido larga y tortuosa y ha contado con numerosos protagonistas. A continuación aparecen los más destacados. Puede que no estén todos los que son, pero sí son todos los que están.
SANTIAGO GÓMEZ SIERRA
El deán de la Catedral es el principal responsable de que Cajasur salga de manos cordobesas. Su presidencia de Cajasur (2006-2010) se ha visto sacudida por una crisis económica de ámbito mundial sin precedentes y por tener que pilotar una nave que se encontraba ya muy tocada por la gestión de Miguel Castillejo. Sin embargo, esto no debe hacer perder de vista que como máximo representante de la entidad fue quien impulsó el voto contrario a la fusión con Unicaja en el consejo de administración del 21 de mayo. Sus cuatro años al frente de Cajasur se ven marcados de forma fundamental por los cinco directores generales con los que convivió mal y con escaso margen de confianza. Su negativa a aplicar los planes de recorte de empleo y sus continuas disputas con parte del consejo de administración, con el Banco de España y con Unicaja contribuyeron de manera determinante a que Cajasur sufriera una importante merma de confianza y resultados.
BRAULIO MEDEL
A pesar de que en el último momento de esforzó para que la fusión con Cajasur saliera adelante, el presidente de Unicaja ha contribuido lo suyo a que la entidad cordobesa tenga el fin que hoy rubricará. Con el paso de los meses no han sido pocas las voces que han criticado al cajero malagueño por su actitud diletante y, en cierta medida, condescendiente con los representantes cordobeses que iban a negociar la fusión, lo que provocó una desconfianza mayúscula entre las partes y la aparición de cierta sensación de abuso entre los patronos de la entidad. Tras el fracaso de su unión con CCM y la firma de los acuerdos del Oriza en el verano de 2008 se esperaba de él una actitud más clara, pero la emisión de comunicados a su plantilla negando algunos avances que daban en materia laboral y su excesivo cierre de posturas a la hora de negociar la reducción laboral hicieron imposible cualquier acuerdo final con Cajasur.
DEMETRIO FERNÁNDEZ
Aunque llegó a última hora y con el proceso ya muy debilitado, al obispo de Córdoba le cabe el haber dado la autorización definitiva para que los patronos de Cajasur votasen en contra de la fusión con Unicaja y a favor de la intervención del Banco de España a través del FROB. La posterior vía judicial que ha abierto el Cabildo para reclamar sus derechos patrimoniales sobre la entidad también tiene su respaldo y demuestra que más allá de la defensa del empleo que se arguyó siempre desde la Iglesia hay otra serie de motivaciones menos espirituales en su forma de actuar.
JOSÉ ANTONIO GRIÑÁN
Su participación se resume en el tiempo que pasa entre el acuerdo de Santa Lucía que pacificó la relación de la Junta con Cajasur en diciembre de 2004 a la venta de la entidad a la BBK. La buena sintonía que logró con la Iglesia cordobesa en su época como consejero de Economía se fue al traste en los últimos momentos de un proceso de fusión en el que no pudo hacer valer su cargo de presidente de la Junta ni sobre Cajasur ni tampoco sobre Unicaja, algo que fue el primer paso para dinamitar la caja única andaluza. Tras la intervención del Banco de España tampoco fue capaz de lograr una oferta desde Andalucía para evitar que la caja saliera de la comunidad autónoma y sus primeras declaraciones tras la adjudicación a la entidad vasca tampoco contribuyeron a pacificar el ambiente. El nuevo rumbo que toma Cajasur necesita de una actitud más colaboradora en tanto entidad fundamental para el desarrollo de Córdoba que es.
MIGUEL ÁNGEL FENÁNDEZ ORDÓÑEZ
El presidente del Banco de España es el gran protagonista en la sombra de cuanto ha acontecido en Cajasur en estos últimos años. Las inspecciones enviadas a la entidad para vigilar su enorme riesgo inmobiliario llevaron primero a unas indicaciones que no fueron seguidas y, después, a la apertura de un proceso de fusión que acabó en intervención. MAFO sufrió los constantes retos de los patronos de la entidad cordobesa y la escasa disposición colaboradora de Unicaja, aunque es cierto que como máximo órgano supervisor del país bien podría haber hecho algo más por evitar la intervención del 21 de mayo. De la adjudicación a la BBK nada cabe decir, toda vez que deja Cajasur en manos de la caja más solvente y con más garantías de España.
MARIO FERNÁNDEZ
El presidente de BBK ha sido el gran triunfador de cuanto ha rodeado a Cajasur en los últimos años. La intervención del 21 de mayo ha puesto en sus manos una entidad en situación de extrema debilidad pero con un potencial muy importante y que le permite ampliar su radio influencia hacia Andalucía. Más allá de los ajustes laborales, ha mostrado un compromiso con Córdoba que traslada garantías de tranquilidad.
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