El rating ESG Risk de Morningstar Sustainalytics ha evaluado el desempeño de Kutxabank en materia ambiental, social y de gobierno corporativo. Así, los riesgos de sostenibilidad del Grupo Kutxabank, al que pertenece Cajasur, se han situado en la categoría mejor valorada –entre 0 y 10 puntos–, ya que Morningstar Sustainalytics considera que son “inapreciables” y que “la gestión general del ámbito ESG es sólida”.

Tras analizar aspectos como la gestión de la ética empresarial, la seguridad y privacidad de los datos, la integración de los criterios ESG en sus productos, el gobierno corporativo o la gestión del capital humano, la firma de rating ha otorgado a Kutxabank una puntuación de 9,1. 

Esta calificación sitúa a Kutxabank como el número dos entre las cajas de ahorros y entidades hipotecarias, y en el puesto 27 de los más de 1.000 bancos evaluados por Morningstar Sustainalytics en todo el mundo.

La agencia ha situado a Kutxabank en el 1% con mejor calificación en Morningstar Sustainalytics a nivel mundial entre un total de 15.600 compañías analizadas.

Un agente muy activo en sostenibilidad

La sostenibilidad es un aspecto clave en el modelo de negocio de Kutxabank, que trata de maximizar el impacto positivo económico, social y medioambiental de su actividad corporativa y financiera. Kutxabank establece y desarrolla relaciones comerciales a largo plazo con clientes y proveedores, basadas en la cercanía, la transparencia y las buenas prácticas. 

La entidad adapta continuamente su oferta de productos y servicios para dar respuesta a la demanda creciente de modelos de negocio y estilos de vida cada vez más sostenibles, a la vez que se compromete a favorecer la inclusión financiera desde una perspectiva de accesibilidad. 

Es un agente activo a la hora de redirigir los flujos de capital privado hacia inversiones sostenibles, acompañando a los clientes en su transición hacia modelos de negocio más sostenibles. Para ello, desarrolla productos de financiación sostenible que incorporan criterios ambientales, sociales y de gobernanza. 

La entidad garantiza el acceso a la información sobre sostenibilidad a sus accionistas e inversores, además de establecer unos canales de diálogo adecuados que permiten una atención ágil y de calidad a sus grupos de interés. Incorpora aspectos ESG en sus decisiones estratégicas, en especial en los riesgos y las oportunidades que se derivan del cambio climático. 

Kutxabank incorporó a principios de 2020 una nueva Dirección de ESG, que engloba el antiguo departamento de Responsabilidad Social Corporativa, cuyo cometido gestionar de forma integral aquellos aspectos relacionados con las finanzas comprometidas con criterios ambientales, sociales y de gobernanza. Uno de sus principales cometidos es reforzar aquellos asuntos relacionados con el cambio climático y la sostenibilidad en todas las áreas de negocio y los servicios centrales de Kutxabank. 

Desde 2021 cuenta, además, con la Oficina Técnica Climática (OTC), dentro del Área Financiera, cuyo objetivo es avanzar en diferentes ámbitos dentro de los aspectos climáticos que afectan a la entidad, en línea con las crecientes y cada vez más exigentes expectativas regulatorias y supervisoras (taxonomía, reporting, stress testing, etc.).