Hay que darse más prisa aún si se quiere conseguir la Capitalidad Cultural de 2016. Éste es el mensaje que ha obtenido el primer teniente de alcalde, Rafael Blanco, tras visitar en los últimos días en Bruselas diversas instancias comunitarias con las que ha tratado diversos asuntos relacionados con la ciudad y, fundamentalmente, con la candidatura para el 2016. Entre otras conclusiones, el portavoz socialista ha vuelto a Córdoba con el dato de que la Unión Europea (UE) ha reducido el plazo en que el Gobierno central debe decidir qué ciudad española optará a la Capitalidad Cultural de 2016. Explicó que el Ejecutivo de Zapatero deberá abrir "antes de enero de 2009" el plazo para la presentación de candidaturas. A partir de este momento deben transcurrir diez meses para la redacción de los proyectos, por lo que "la decisión en el ámbito español se tomará en 2010", por lo que se adelanta en dos años la previsión existente hasta ahora.

La decisión que adopte España deberá ser ratificada en Bruselas por un comité de 13 expertos, de los que seis serán españoles y los siete restantes de otros tantos países de la UE. "Esta evaluación será definitiva y adoptada con rigor e independencia", explicó.

"Hay que empezar a trabajar ya y bien" si se quiere conseguir la Capitalidad Cultural, señaló el primer teniente de alcalde, quien añadió que el proyecto que debe competir debe reunir una serie de requisitos, como que "sea innovador, tienda nuevos puentes, que esté encabezado por un experto de alto nivel cultural y que esté orientado en clave europea, no nacional ni local".

Con este viaje a Bruselas, Blanco ha establecido unas vías de comunicación permanentes con los órganos de decisión de la UE. Como ejemplo, comentó que visitó la Delegación de la Junta de Andalucía, dirigida por la cordobesa Elvira Saint Gerons, en donde se le informó que "era la única ciudad importante de Andalucía que nunca había ido" en los últimos 14 años. El portavoz socialista ha regresado del viaje impregnado de la nueva filosofía que regirán las subvenciones que conceda la UE en el periodo 2008-2013. Éstas se resumen en dos puntos: que los proyectos que se presenten tengan continuidad en el tiempo, que se establezcan redes de ciudades y que todas las acciones que se establezcan tengan compromiso social y ciudadano.

Los representantes de la Comisión Europea que se entrevistaron con Blanco, además de mostrar su sorpresa por el número de candidaturas que han surgido en España, han señalado que los niveles de exigencia "se van a incrementar y se van a regular mejor estos procesos", en los que se van a examinar más las infraestructuras generales de la ciudad. Sobre este aspecto, el primer teniente de alcalde indicó que "valoran positivamente que Córdoba tenga aeropuerto, así como que esté comunicada por AVE y autovía". El estudio de las plazas hoteleras que podría disponer la ciudad en 2016 "habrá que verlo en su momento".

Como ejemplo que puede servir a la candidatura de Córdoba, Blanco señaló que el martes se presentó Burdeos el proyecto para la Capitalidad de 2013, lo que le sirvió para mantener una entrevista con su alcalde, Alain Juppé, y el presidente de la región de Aquitania, Alain Rousset. Como conclusión de esta experiencia, Blanco señaló que la ciudad francesa "está basando todas sus energías en el proyecto, aunque no tienen los elementos culturales de Córdoba". Añadió que los puntos fuertes de la candidatura son "el vino, el río y un palacio de la Ópera". Con estos elementos, el portavoz socialista entiende que Córdoba "tiene que presentarse a todas las iniciativas posibles, porque tiene capacidad para ello, y también hay que consolidar su presencia de forma permanente en las redes de ciudades".

La ciudad española que consiga la Capitalidad Cultural tendrá que compartirla con una polaca, puesto que en los últimos años hay una sede para los países tradicionales de UE y otra para los de reciente incorporación.