Gervasio Sánchez arranca el seminario de periodismo en zona de conflicto Julio Anguita Parrado en Córdoba

Con la conferencia titulada Periodismo y conflictos: veinte años de guerras. De Irak a Ucrania, a cargo del periodista Gervasio Sánchez, se inicia este jueves 13 de abril el seminario permanente de periodismo en zona de conflicto Julio Anguita Parrado, impulsado por la Cátedra Unesco de Resolución de Conflictos de la Universidad de Córdoba (UCO) con la participación del Sindicato de Periodistas de Andalucía.

El acto tendrá lugar a las 19:00 en el salón de actos del Rectorado de la UCO. La entrada es libre hasta completar aforo.

El objetivo de este seminario, que lleva el nombre del periodista Julio Anguita Parrado, fallecido el 7 de abril de 2003 alcanzado por un misil en Bagdad cuando cubría la guerra de Irak, es crear un foro de encuentro y de análisis de los conflictos bélicos que asolan el mundo actual y de cómo son abordados informativamente por los medios de comunicación.

Las actividades se desarrollarán con periodicidad anual enmarcadas en el contexto del Premio Julio Anguita Parrado que cada año se entrega el 7 de abril, coincidiendo con el aniversario de la muerte del periodista cordobés. Igualmente, en cada una de las sesiones que se programen está previsto contar con la participación de periodistas reconocidos con este premio desde 2007, integrantes del jurado en sus diferentes convocatorias o especialistas de reconocido prestigio en conflictos internacionales.

Biografía de Gervasio Sánchez

Gervasio Sánchez fue galardonado con el Premio Julio Anguita Parrado en 2011. Nacido en Córdoba en agosto de 1959, se licenció en 1984 en la rama de Periodismo de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Autónoma de Barcelona.

Desde entonces ha trabajado como periodista independiente para diferentes diarios y revistas, especializándose en conflictos armados. Su trabajo destaca por captar el lado humano de la noticia y por su implicación con los más débiles, principalmente mujeres y niños, que han sido y son en gran medida los protagonistas de la mayoría de sus publicaciones y documentales.

Desde 1984 hasta 1992 cubrió la mayor parte de los conflictos armados habidos en América Latina. Desde 1988 mantiene una estrecha relación con el Heraldo de Aragón. Ha trabajado como enviado especial de este diario aragonés tanto en la guerra del Golfo como en los distintos conflictos armados en la antigua Yugoslavia, África, Asia y América Latina. También colabora con la Cadena SER y el servicio español de la BBC desde 1994.

Dirige desde 2001 el Seminario de Fotografía y Periodismo que organiza la Fundación Santa María de Albarracín. Es presidente de Honor de la Asociación Fotográfica Cordobesa (Afoco) desde 2021. Es maestro de la Fundación Gabo (Gabriel García Márquez).

Gervasio Sánchez es autor de numerosos libros. El último de ellos, Violencias. Mujeres. Guerras (Blume), fue publicado en 2021 y ofrece una recopilación de imágenes tomadas entre 1984 y 2017 en veinticinco conflictos armados y graves crisis humanitarias, con el apoyo del Instituto Aragonés de la Mujer.

El trabajo y trayectoria del periodista cordobés han sido reconocidos con numerosos premios entre los que destacan, además del Julio Anguita Parrado, el Premio Nacional de Fotografía, el Premio Cirilo Rodríguez, el más prestigioso del Estado español para periodistas que ejercen su labor en el extranjero como enviados especiales o corresponsales permanentes o el Premio Ortega Gasset de Fotografía, entre otros.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura le nombró durante la celebración del 50 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en diciembre de 1998, Enviado Especial de la Unesco por la Paz por "el extraordinario testimonio que ofrece mediante la fotografía del calvario que padecen las víctimas de las minas antipersonas y por su infatigable promoción de una cultura de la paz al sensibilizar a la opinión pública mundial sobre la necesidad de proscribir estas armas y de ayudar a los mutilados a reinsertarse en la vida cotidiana".

En mayo de 2011 recibió la Gran Cruz de la Orden Civil de la Solidaridad Social, condecoración aprobada por el Consejo de Ministros en un Real Decreto.