Una agrupación de vecinos de Las Margaritas y la Colonia de la Paz se han concentrado este martes cortando nuevamente el tráfico rodado en la avenida de Trassierra durante varias horas para denunciar el "retraso" y "la mala gestión del Ayuntamiento" en las obras que se llevan realizando desde enero en dicha carretera y que, según los plazos municipales, deberían acabar a finales de este año. 

La realidad a pie de calle, con las excavadoras, el pavimento por colocar y, sobre todo, la subestación eléctrica de Endesa que aún permanece en pie ocupando lo que debe ser el desdoblamiento de uno de los carriles y paralizando, por tanto, el transcurso de la obra, no hace presagiar que los trabajos en la avenida estén terminados antes de 2024, como se prometió.

"Es un desastre de gestión de obra. Han cerrado el barrio por completo durante un año que llevamos ya de obra", ha manifestado Jesús Tejero, vecino y comerciante de la zona, que añade que es "una situación asfixiante tanto para la movilidad y accesibilidad de los vecinos de la zona -con un alto porcentaje de personas mayores-, como para los negocios y los proveedores que hacen la ruta por los comercios de la avenida y sus alrededores". 

Obstáculos, socavones o charcos dificultan el tránsito de lado a otro de la avenida, cuando no lo impiden directamente como ha sucedido con las últimas lluvias. 

Después de bastantes reclamaciones presentadas a la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) y a los propios obreros de la empresa adjudicataria, los vecinos han logrado que se faciliten algunos accesos con rampas o tablones para personas mayores que utilizan andador o sillas de ruedas. Sin embargo, también han manifestado otros problemas de acceso y movilidad que no se han resuelto, como cortar la circulación de vehículos en el tramo, perjudicando a los propios vecinos y la llegada de clientes a los comercios.

En este sentido, Tejero ha destacado que "el ayuntamiento se reunió con nosotros en el mes de mayo, antes de las elecciones municipales, y nos prometió pequeñas ayudas a los comerciantes para paliar las pérdidas derivadas de las obras": unas ayudas con fondos de la Unión Europea, que se debían aprobar antes del mes de diciembre y de las que no conocen nada más, salvo una intención de llevarlas próximamente al Pleno. El asunto quedó paralizado y ahora son llamadas perdidas y mensajes sin contestar los que acumulan por parte de la administración local.

Según los vecinos, son "tres o cuatro" los establecimientos que han cerrado por no aguantar las pérdidas derivadas de la obra, especialmente aquellos cuya clientela es mayoritariamente de fuera del barrio. "Ningún comercio de aquí está preparado para estar un año y medio ahogado: nos está costando el dinero de nuestros negocios, estamos perdiendo un margen de venta mensual, mientras nos sube la hipoteca o el IPC", ha señalado Tejero a este periódico.

Otra de las reclamaciones que más despiertan la impotencia de los vecinos es la instalación de la nueva "caseta" de la compañía eléctrica, que se ha levantado como una isla en mitad del futuro acerado, en sustitución de la anterior que todavía permanece anclada paralizando el transcurso de la obra.

Según los vecinos, "el magnetismo" de la nueva caseta eléctrica incumple la normativa, ya que "puede producir dolores de cabeza o migrañas a los residentes de las viviendas cercanas", además de que denuncian que se deberían haber contemplado otras soluciones como soterrarla o buscarle otro lugar. La respuesta del consistorio, dicen, es que cumple la legalidad y que ocupa menos espacio que la anterior.

Con esta es ya la quinta concentración convocada por los vecinos, y no será la última: el próximo 12 de diciembre volverán a cortar el tráfico, ha avisado Luis Gómez Lara, vecino y miembro de la agrupación de vecinos. 

"Esta avenida podría haber estado abierta ya a finales de año, pero desde enero hasta agosto solo ha habido cuatro trabajadores en la obra", achacan los vecinos como uno de los principales motivos del retraso. Según sus previsiones actuales, no será "hasta el mes de junio o julio del próximo 2024" cuando puedan ver finalizada la segunda fase de esta avenida, quedando aún pendiente la tercera fase.  

El tramo que falta

Para que la remodelación integral de la avenida de Trassierra sea completada quedaría un tercer tramo en el que actuar, el que discurre desde la glorieta de la iglesia de Las Margaritas hasta la plaza de las Tres Culturas, un tramo de unos 150 metros que depende de una junta de compensación. "Hay una unidad de ejecución urbanística y una junta de compensación que es propietaria de parte de los suelos por los que tiene que discurrir la avenida, lo que complica la actuación porque, o la desarrolla la junta de compensación, y nosotros con ella, o el Ayuntamiento tendría que hacerse con los suelos para ello", explicó el alcalde de Córdoba, José María Bellido, durante su última visita oficial al lugar, pasado 29 de octubre.

El regidor manifestó entonces que la disposición por parte de los propietarios a que la reforma de esa zona de la avenida se haga realidad era "muy positiva", esperando poder "llegar pronto a un acuerdo con ellos para que en este mandato se quede ya resuelto ese tramo".