Alfonso Reyes prosigue con su particular batalla contra el covid-19. El exbaloncestista cordobés, actual presidente de la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP) y hermano de Felipe Reyes, se ha convertido en una de las caras más conocidas en la batalla contra el temido coronavirus. Y es que desde que hace más de una semana confirmara su contagio, Reyes ha ido relatando su caso en las redes sociales, recibiendo el apoyo de miles y miles de usuarios.

El que fuera pívot de baloncesto, llegando a la selección española absoluta, tuvo que ser ingresado en la noche del sábado, después de que las constantes molestias le obligaran a regresar al hospital para realizarse unas placas en los pulmones. Un resultado no muy positivo de esas pruebas aconsejó el ingreso del cordobés en el Hospital Puerta de Hierro de Madrid.

Como ha venido haciendo desde que se conoció su positivo por covid-19, Alfonso Reyes ha seguido relatando a través de su cuenta de twitter su estado. En las últimas horas, el cordobés ha mejorado en su estado de salud, a pesar de que incluso necesitó de oxígeno debido a los problemas respiratorios que el virus le había provocado.

Con un sentido del humor admirable en medio de una situación complicada de salud, el mayor de los hermanos Reyes cuenta su historia a la vez que agradece las muestras de ánimo que está recibiendo desde todos los puntos del territorio nacional. Ni siquiera las complicaciones para recibir una cama en el hospital (no la tuvo hasta las 4 de la mañana), o el escaso tamaño de los pijamas del centro hospitalario para su talla de pívot de baloncesto le borraron las ganas de bromear con sus seguidores.

Debo insistir, gracias infinitas por vuestro apoyo y ánimo. Ayuda muchísimo, no estoy solo. Siento el aliento de decenas de legiones dispuestas a aniquilar al hideputa.

— Alfonso Reyes (@alfreyes14) March 22, 2020

El diario que Reyes ha venido confeccionando a través de su cuenta de twitter en la última semana recoge de una manera fidenigna todos los pasos por los que puede transitar un enfermo de covid-19. También, además, se ha convertido en un ejemplo de optimismo y entereza a la hora de hacer frente a la enfermedad (el "perro negro", como ha bautizado al coronavirus). Una batalla que el bueno de Alfonso ganará sin lugar a dudas.